Nacionales | 13 Jun Lacalle dice adiós
Fue breve pero claro. Luis Alberto Lacalle anunció su renuncia al Directorio del Partido Nacional y a su candidatura en las próximas internas. El anuncio no sorprendió pues ya era noticia sabida pero igualmente fue un acontecimiento político y mucho más para los nacionalistas. El nuevo presidente del Directorio será el senador Luis Alberto Heber.
“Todas estas reformas, su realización y su concreción, tienen que estar en manos de los compañeros más jóvenes que van a darle su final y las van a ver plasmadas en la realidad”, dijo Lacalle, quien fue presidente del Directorio también entre 1999 y 2004. Lacalle aseguró a El País que la decisión de no volver a postularse está tomada y es “sin retorno”. De nada sirvió que antes del anuncio oficial se presentara una moción con más de 100 firmas para evitarlo.
El senador Jorge Larrañaga, que ha tenido múltiples diferencias con Lacalle, intentó enfatizar la unidad partidaria. “Este partido tiene unidad por encima de la diversidad y de la discrepancia”, enfatizó el líder de Alianza Nacional. En la agrupación “todos hemos tenido diferencias con todos”, admitió. También reconoció los “enfrentamientos” con Lacalle, para lo cual usó una figura particular. “Podemos ser como dos especies de piedras que cuando chocan saltan las lascas. Pero el partido sabe que siempre que nos precisó nos tuvo y nos tiene para construir el presente y el futuro”, dijo.
La gran pregunta es quién sucederá a Lacalle en la competencia con Larrañaga en las internas. Luis Alberto Heber, Juan Chiruchi y Ana Lía Piñeyrúa, son nombres que ya empezaron a sonar. Son varios los que hablan de que es tiempo de que su hijo, el diputado Luis Lacalle Pou, adquiera más protagonismo. Fuentes de Unidad Nacional dijeron que se van a tener que crear candidaturas que puedan “reemplazar la fortaleza del liderazgo de Lacalle”, y destacaron la “actitud generosa” del expresidente hacia su sector, “generando los espacios para las nuevas generaciones”.
“Revisionismo en serio”
Mientras tanto el intendente de Colonia Walter Zimmer reclamó que el Partido Nacional realice “un revisionismo en serio” para levantar las banderas de un espacio de “centro izquierda”. “Resulta que hoy la palabra progresismo e izquierda, acuñada ya hace un montón de tiempo es bandera del Frente Amplio, y yo no regalo banderas, señores, las banderas son nuestras, no es patrimonio de ningún partido”, dijo, según publica La República.“Hay que hacer un revisionismo en serio porque aquí, yo sé lo que va a pasar si no nos ponemos el overol, la prensa y todos dirán: ‘se reunieron los blancos, más de lo mismo’. Y no es eso lo que buscamos”, sostuvo Zimmer. “Que los espacios se ocupen, que ese centro izquierda que se perdió se ocupe de vuelta, pero de corazón, porque hay que sentirlo; la palabra no se pronuncia sino que se ejecuta con el corazón”, agregó.
“Caótica situación”
Los blancos también aprovecharon la convención para criticar al gobierno. La declaración votada por unanimidad critica duramente la gestión del gobierno. “La situación política que atraviesa el país, condicionada por las marchas y contramarchas del gobierno, constituyen un dato recurrente de la realidad. Ellas son la consecuencia de las discrepancias entre el presidente, sus ministros y la coalición a la que pertenece”, comienza la declaración. Según los blancos, el ejemplo más “dramático” de marchas y contramarchas se dio al discutirse la anulación de la Ley de Caducidad. “La sucesión de episodios que se dieron mostró la coalición empecinada en mantener sus puntos de vista a cualquier precio, enfrentando incluso a la autoridad presidencial; y seguidamente, el titular del Poder Ejecutivo resignado a subordinarse al predominio de aquella fracción política”, señala.
También criticaron la gestión en políticas sociales y aseguraron que la invocación permanente del gobierno a estas políticas “no puede ocultar el fracaso de las mismas”. Un capítulo aparte merecieron las críticas al estado de la salud y la enseñanza. “La caótica situación que no repara en los daños que hace a la sociedad toda, tiene su más elocuente expresión en el desastre de la conducción en las áreas de la educación y la salud sometidas a la disputa política, a la cuotificación exasperada entre las fuerzas del partido de gobierno y a la incapacidad técnica para su dirección”, afirma.
Preocupación frenteamplista
Y hablando del Frente Amplio, el secretariado ejecutivo discutió durante nueve horas en el hotel NH Columbia para intentar encontrar una herramienta que le permita destrabar la crisis interna. Según informó Últimas Noticias, uno de los temas centrales fue la polémica por la implementación del impuesto a las tierras. El presidente de la coalición, Jorge Brovetto, explicó que si bien “el que haya enfrentamientos” no es el mejor “método”, lo importante es que no se discute sobre “tonterías” sino sobre temas que, “en todo caso, otros partidos políticos en el pasado no hicieron”.