Paysandú, Martes 21 de Junio de 2011
Locales | 18 Jun Obedeciendo al planteo de la bancada del Partido Colorado, integrada por los ediles Alvaro Alza y Mauricio De Benedetti, se llevó a cabo una sesión especial de la Junta Departamental para recordar la figura de José Batlle y Ordóñez, por los 155 años de su nacimiento y 100 años de su segunda presidencia de la República. En la oportunidad estuvieron presentes el diputado Walter Verri, dirigentes y ex ediles del Partido Colorado, así como invitados especiales.
Hizo uso de la palabra el edil Alvaro Alza, quien recordó que José Pablo Batlle y Ordoñez nació en Montevideo, el 21 de mayo de 1856, hijo de Lorenzo Batlle Grau --quien fuera presidente de la República-- y Amalia Ordóñez Duval. “Estudió en la Facultad de Derecho y en 1880, a falta de cuatro materias para terminar su carrera, dejaría sus estudios universitarios para embarcarse en un viaje por Europa, donde adquirirá una visión avanzada del mundo e incorporaría teorías políticas. Luego de su viaje a Europa, fundó el diario ‘El Día’, donde se dedicó a la crítica del gobernante militar Máximo Santos (antes lo había hecho como periodista contra Lorenzo Latorre) y de otros sectores del gobierno que él consideraba autoritarios, posicionamientos políticos que le causaron detenciones y cárcel en varias ocasiones”.
Acérrimo positivista
Alza citó el posicionamiento político de Batlle y Ordoñez, al comienzo del siglo XX, como “una figura de mediación a la presidencia, que asumió en 1903 y que se concretaría gracias a nueve votos blancos”. En ese período de gobierno se produjeron los levantamientos del Partido Nacional y pese a ellos “pudo consolidar definitivamente la autoridad del poder central en toda la República”, así como “intentó favorecer el surgimiento de la industria nacional y disminuir la dependencia del exterior por la importación de azúcar, a través de una ley en la que se otorgaban varias primas anuales y semillas seleccionadas”, entre otras acciones positivas como “en el plano educativo la creación de la Facultad de Comercio (luego Facultad de Ciencias Económicas) y la Facultad de Veterinaria y Agronomía”. También dijo que “se ha definido ideológicamente a Batlle y Ordoñez como un acérrimo positivista, con inmensa fe en las capacidades del hombre. Estaba convencido de que el ser humano podía llevar a cabo todos los cambios necesarios dentro de un modelo liberal y racional; sin necesidad de llegar a la revolución, concepto unido inexorablemente en aquel contexto a las armas y a la sangre. Consideraba necesario que las decisiones de la mayoría fuesen obligatorias para las minorías”. Su consigna en el aspecto económico fue tratar de ampliar el espectro en el que el Estado pudiera accionar y ello sería la base de un marcado intervencionismo estatal. Se vería también esta estrategia en el “proteccionismo aplicado a las exportaciones, gravando altamente a las importaciones”.
Libertad y justicia social
El orador recordó palabras de Batlle y Ordoñez, cuando afirmaba que “garantizando tanto la libertad como la justicia social, sería inevitable una total democracia en el Uruguay” y que “veía que si se garantizaban los derechos del sufragio universal, no sería nunca necesaria una revolución ya que el voto sería simplemente más efectivo. Es así que dijo públicamente: ‘en las repúblicas, el obrero tiene el voto, que es mucho más eficaz que el grito, la pedrada, o el tiro en la calle. El bien de los obreros no se logrará sino por la unión de los hombres de todas las clases que sinceramente la deseen, y esa unión es posible dentro del régimen republicano y de sufragio universal”’, añadiendo que además “otorgó el sufragio a la mujer, a los inmigrantes e intentaría implementar el plebiscito”.
“Consideró necesaria también la creación de un Ejecutivo Colegiado para la tarea de gobierno, ya que así se erradicaría, a su entender, cualquier amenaza de una dictadura personal (lo cual se veía favorecido en aquel entonces por la gran cantidad de poderes que se le otorgaba en nuestra Constitución de 1830 al presidente). También se admitió a favor y llevó a cabo la separación del Estado de la Iglesia, lo que para él significaría la total libertad de conciencia en la población”. Subrayó Alza que “sin dudas fue un hombre de una gran virtud cívica y mayor humildad, llegando a expresar en un acto cuando se le quería nombrar jefe, que el Partido en el que militaba ‘no tiene jefe alguno; es jefe de sí mismo, se dirige a sí mismo, hace su propia voluntad y tributa sus aplausos a quienes mejor realicen sus aspiraciones y censura a quienes se oponen a ellas’”.
Avance social
Recordó que siendo elegido nuevamente presidente de la República el 1º de Marzo de 1911, “Batlle y Ordóñez seguiría con su programa de intensas reformas y cambios profundos en el país. Es así que en junio de ese mismo año remitió un proyecto que exigiría la jornada laboral de 8 horas, la prohibición del trabajo a menores de 13 años, 40 días de descanso en período de embarazo para la mujer y un día de descanso cada 6 de trabajo, entre otras reformas. Por supuesto que estas reformas serían gravemente criticadas por las clases conservadoras, opuestas a todas ellas”. “También se enviaron proyectos de ley de índole humanitaria tales como la prevención de los accidentes de trabajo, la ley sobre indemnización por despido, que establecía que siempre se debía avisar con dos meses de anticipación el despido de un obrero y que se le debía pagar un sueldo cada dos años de trabajo”, entre otros avances de seguridad social.
“Siguiendo la ideología del estatismo, buscaría la nacionalización de los bancos, medida que no fue tomada con tanta crítica por la oposición ya que existían en el momento ejemplos de los buenos resultados que esta estrategia obtenía. El Banco República tendría un éxito impresionante y superaría pruebas muy difíciles, como la Primera Guerra Mundial, lo que no hará más que aumentar la credibilidad de la población en el gobierno. Luego se proseguirá a buscar una solución de los pequeños propietarios, quienes no eran atractivos para los grandes bancos extranjeros por su imposibilidad de pagar los intereses necesarios. Es con el objetivo de solucionar este problema que se estatizará el Banco Hipotecario en 1912”.
“También la ley creando el monopolio de los seguros contra inclemencias del tiempo y accidentes de trabajo a través del Banco de Seguros del Estado, donde una vez más aparecen resistencias de la oposición y hasta por los ingleses ya que era el primer lugar de América donde se llevaría a cabo”. Afirmó más adelante que “otro aspecto en donde se notó claramente la nacionalización fue en lo relativo a los ferrocarriles, que se encontraban en manos de ingleses” cuyo poderío económico “intentaría ir debilitando con la estrategia de construir rutas paralelas, con la creación de carreteras para automóviles, medio en pleno auge que permitiría la competencia con los ferrocarriles”.
Valor nacional
Sostuvo que José Battle y Ordóñez “es y será una bandera y estandarte del Partido Colorado, pero fundamentalmente es hoy un valor de nuestra nación, porque pudo concebir y llevar a la práctica un país para todos, de inclusión y de justicia social, basado en la tolerancia, y como él mismo lo definió: ‘Nuestra obra es de justicia para todos, para nosotros y nuestros adversarios, para nuestros hijos y los hijos de nuestros adversarios”’.
El edil Alza, al culminar su oratoria, honró el recuerdo de Batlle y Ordóñez expresando: “tu luz sigue brillando en tus ideales y en tu obra. Por más que intenten, jamás la podrán apagar, ¡hoy más que nunca vives en el espíritu de nuestro pueblo!”
En sala se leyó una nota de la Mesa Departamental del Frente Amplio con conceptos laudatorios desde el plano social y, por su parte, el edil Ramón Appratto --quien señaló la presencia en sala del presidente de la Comisión Departamental Nacionalista-- ratificó su adhesión a las palabras vertidas en reconocimiento a la figura de José Batlle y Ordóñez.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Jun / 2011
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com