Opinion | 25 Jun Al que no quiere caldo, dos tazas, sostiene el refrán. Y es así que mientras la educación sigue padeciendo graves problemas y peor aún, sigue manteniendo la misma tendencia de deterioro de los últimos años, en el primer proyecto de Rendición de Cuentas que elaboró el Codicen se solicita más de cuatro veces el monto que el Ejecutivo le asignó a la ANEP (Administración Nacional de la Enseñanza Pública).
Esta actitud de prescindencia de las autoridades de la educación no debería llamarnos la atención en cuanto a donde ponen el acento, pero además pone de relieve por lo menos una desconexión absoluta de la realidad, cuando se siguen reclamando más y más recursos como si todo lo demás no existiera y el dinero saliera de abajo de las piedras.
Tenemos así que luego de recibir las propuestas para la Rendición de Cuentas de los diferentes subsistemas de la educación (Primaria, Secundaria, UTU y Formación Docente), el Codicen elaboró un articulado que solicita un monto de 4.000 millones de pesos para la ANEP. Sin embargo, el Ministerio de Economía y Finanzas ya definió que el dinero adicional que recibirá la educación pública a través de la Rendición de Cuentas (por el crecimiento del Producto Bruto Interno - PBI) será de aproximadamente 1.200 millones de pesos (unos U$S 60 millones), que se repartirán entre la ANEP (80%) y la Universidad de la República (20%).
Lamentablemente, las autoridades del sector siguen en sus trece, reclamando que se les entregue más y más recursos, sin garantías de cambio en la deficiente calidad de la educación que hoy padece nuestro país.
Peor aún, ni siquiera mencionan como va a repercutir este dinero adicional en la esfera educativa, ni como se va a hacer para que el esfuerzo que se pide a los contribuyentes se traduzca en un mayor rendimiento en las aulas.
Es decir que la consigna es obtener más dinero, cuyo destino después se verá, mientras el ciudadano siga pagando y otorgando un cheque en blanco para que se haga lo que quiera con sus recursos, en tanto sigue aumentando la deserción en Secundaria y empeorando el nivel educativo en todas las ramas de la enseñanza.