Paysandú, Sábado 02 de Julio de 2011
Locales | 30 Jun Christian Cusimano, integrante de la Unidad Departamental de Seguridad Vial (Udesev), al comentar la actuación de funcionarios de la Dirección de Tránsito en un incidente vial que derivó en un accidente de tránsito en la tarde del pasado jueves 23 dijo que “todo parece indicar que las cosas no se hicieron siguiendo técnicas correctas ante una situación de este tipo”.
Indicó que “sabíamos desde hace tiempo que la decisión de Canoniero (el director de Tránsito) es que no se persiga a las personas que cuando advierten la presencia de inspectores de Tránsito escapan para evitar ser sancionados de acuerdo a la Ordenanza de Tránsito”.
“A la orden la entendemos pertinente, porque con doce inspectores con los que cuenta hoy la Intendencia no es posible hacer buenas coberturas, triangulaciones. Con los recursos humanos y materiales actuales, es muy difícil hacer un buen trabajo, por eso la orden de Canoniero es buena”, dijo Cusimano, quien agregó que “puntualmente en lo que refiere a este hecho, como fue conversado en la última reunión de la Udesev, entendemos que hay un error de procedimiento, que no se puede ir tras un conductor que es detectado en infracción porque lo asumirá como una maniobra agresiva”.
En esas circunstancias “lo más lógico es que el infractor trate de huir, por lo que ir tras él con el objetivo de solamente tomar el número de su matrícula no parece un procedimiento a seguir, como digo, por los pocos inspectores con que hoy se cuenta”, agregó.
“Si se tiene orden de no perseguir, ni siquiera se puede ir tras el vehículo con la intención de ver el número de matrícula. El accidente en que terminó esta acción demuestra el por qué”, subrayó.
Cusimano opinó que “hay que esperar no solamente el ingreso de los cuarenta nuevos inspectores de tránsito sino también el comienzo de un trabajo coordinado entre la Policía y la Dirección de Tránsito, con vehículos, con personal, en fin, montar operativos que realmente puedan dar sus frutos y castigar con rigor a quienes una y otra vez cometen infracciones en nuestro ya caótico tránsito”.
“Lamentablemente, somos hijos del rigor; no debería ser así, pero lo es”, comentó el integrante de la Udesev. Y relató una experiencia vivida en la misma tarde de ayer: “en avenida Dr. Roldán y Antonio Estefanell vi cómo una mujer que conducía una camioneta de reparto, aunque no pude identificar la marca del producto, le advertía a unos muchachos que andaban en moto sin casco protector que en las cercanías había inspectores de tránsito”. Sostuvo que “este tipo de situaciones no tienen explicación posible. Menos todavía en una mujer, que debería ser más sensible a las situaciones de riesgo a que se exponen estos jóvenes, los multen o no. Esa es la cuestión. No se trata de una multa, sino de vidas en peligro. ¿Cuándo lo entenderemos?”
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