Locales | 03 Jul En el Farol Comunitario de Barrio Chaplin tuvo lugar el encuentro denominado “Interfarol”, del cual participaron, además del anfitrión, los faroles de los barrios Curupí, Vista Hermosa, Velódromo, Norte y el Farol Suroeste. Las actividades de la jornada --de la que participaron niños, adolescentes y adultos mayores-- comenzaron por la mañana, con actividades deportivas en el Complejo Camandulli, donde los adolescentes jugaron fútbol y manchado. Mientras tanto, en el local del Farol, situado en Joaquín Suárez y Andresito, los niños compartieron juegos junto a las maestras, y los adultos mayores disfrutaron de un entretenido bingo. Tras un almuerzo compartido, los más pequeños participaron en más juegos y los adultos presentaron scketchs y actividades de canto. Se hicieron sorteos, y se entregaron premios. Cada uno de los abuelos presentes recibió un plantín como regalo, y quienes fueron ganadores de las competencias deportivas cumplidas en el Complejo Camandulli recibieron trofeos. A partir de las 16 hubo un espectáculo de rock, con la actuación de las bandas “Círculo”, “Reverb” y “Perro de Agua”.
Los Faroles Comunitarios
Consultadas sobre el programa de los Faroles Comunitarios, la directora de Promoción Social, Cecilia Bianchini y la asistente social Lourdes Díaz recordaron que se trata de centros comunitarios de educación no formal, que cuentan con equipos interdisciplinarios integrados por maestras, educadores, profesores de educación física y talleristas de canto, danza, percusión, plástica, teatro, circo y manualidades, entre otras disciplinas. “En todos es variable; lo que se va trabajando depende de las inquietudes de la gente”, explicó Bianchini. En estos días, a solicitud de quienes asisten al Farol de Barrio Chaplin se han iniciado actividades de ajedrez, y de cerámica en el Curupí. “Otros lugares han pedido más danza, canto, manualidades, artes plásticas... otro tipo de cosas, además de las que ya hacen”.
Los Faroles cubren una franja etaria de entre 6 y 18 años. “En la parte de niños se apoya el tema curricular y todo lo que tiene que ver con la escuela, y se refuerza con talleres de inglés”, explicó Díaz. “También se trabaja otro tipo de destrezas, a través de las manualidades, el dibujo, la pintura, la cerámica, la danza, la comparsa... Y también con deportes y artes circenses. Se busca que el cuerpo y la cabeza estén en movimiento, para hacer un enfoque lo más integral posible”. Se tiene en cuenta además al adulto mayor, “para que tenga un lugar donde se sienta contenido, pueda expresarse, trabajar temas de su interés, que pueden estar relacionados con la salud, con la convivencia familiar... A veces se invita a especialistas a dar una charla. También se trabaja con manualidades, con expresión plástica...” El principal cometido de los Faroles es generar el fortalecimiento de los individuos, la familia y la comunidad, y fomentar la capacidad de reflexión, participación, organización, capacidad de propuestas y protección, generando ciudadanía.
Su actividad se coordina con las redes zonales, “porque esto no tiene que quedar aislado de lo que se viene trabajando, ya sea con la escuela, con la policlínica...”, dijo Díaz.
“Entonces nos sumamos a las reuniones de la mesa de los SOCAT (Servicios de Orientación, Consulta y Articulación Territorial), y en algunos casos a las reuniones de los nodos, donde se trabajan situaciones de maltrato, abuso y violencia doméstica”.
“La idea es reforzar el trabajo en red, para que cuando se haga una intervención no se multipliquen las cosas, sino que todos las enfoquemos de la mejor manera posible”. Los Faroles han participado en actividades como un encuentro de básquetbol, actividades en las piscinas de la ciudad, una fiesta en plaza Acuña y en el Balnerario Municipal o la recreación de Villa Purificación. También en el carnaval, en la ciudad y el Interior, donde los Faroles de Vista Hermosa y el Velódromo participaron con una comparsa, y el de barrio Chaplin con una carroza.