Había quejas de vecinos

Locales | 06 Jul En breve Azucarlito espera tener solucionado el problema del ruido que origina en determinados períodos la planta de generación de electricidad a biomasa, desde que se ha construido un dispositivo por una fábrica alemana que hace las veces de silenciador para la turbina cuando ésta es despresurizada en determinadas situaciones, adelantó a EL TELEGRAFO el director gerente de la refinadora de azúcar crudo, Cr. Raúl Cancelo. El silenciador llegará por vía aérea hasta Paysandú, a efectos de acelerar el proceso de instalación, en tanto también se está trabajando en procura de eliminar el polvillo que se levanta cuando se opera con la biomasa en la fábrica, que no solo es un problema para los vecinos, sino también para los rodamientos en la propia planta, señaló asimismo el jerarca.
La queja de residentes en la zona por el fuerte ruido que se genera desde la planta en determinadas oportunidades ha sido transmitida en más de una instancia y ha sido a la vez motivo de planteos en la Junta Departamental y gestiones de la propia Intendencia Departamental a través de su unidad de medio ambiente, en tanto Azucarlito ha sido receptiva desde un primer momento a estas inquietudes. Cancelo destacó que este problema no se presentaba cuando la planta solo funcionaba para el refinado, desde que se podía despresurizar sin prisa para evitar el riesgo de una explosión, pero cuando se ha pasado a generar en el mercado spot para UTE las exigencias en tiempo son otras, y este proceso debe hacerse rápidamente, lo que es el causante del ruido que se percibe en el área.
Destacó que el sonido se produce “cuando hay algún corte en el turbo, ya sea por maniobras de UTE” o porque no encuadra directamente en el voltaje o la frecuencia de red, así como en los casos que se dieran en junio último, “ante tormentas eléctricas que han provocado la caída de rayos en cables e inmediatamente se ha cortado la turbina, lo que requiere ventear el vapor, que está a 30 kilogramos de presión. Al ventearse, se causa el fuerte silbido que se escucha en la zona”, lo que no ocurría solo con la refinación.
“Cuando se trabaja a 30 kilos para producir energía, y hay un corte de la turbina, no queda otra alternativa que ventear. Hemos estado buscando distintas soluciones, evaluamos algunas alternativas, por las que sin embargo no lográbamos reducir significativamente el silbido”, expuso Cancelo.
Un silenciador a medida
Precisó que a través de contactos se logró determinar que una fábrica de Alemania se especializa en la fabricación de silenciadores, “por lo que le dimos nuestras especificaciones y nos fabricaron un silenciador de acuerdo a nuestros requerimientos”, el que tiene un costo de entre 15.000 a 20.000 euros, con envío incluido.
La fabricación estuvo acordada para la entrega en un plazo de noventa días, a cuyos efectos se coordinaron las autorizaciones para la exportación desde Alemania y se está esperando ahora el envío desde la nación europea. También indicó el director gerente de Azucarlito que el polvillo que surge del manejo de la biomasa para quemar en la caldera es otro problema que afecta a la zona, en un aspecto que se presentó cuando se ingresó de lleno a la actividad de generación previa acumulación de material de quema.
“Estamos analizando posibles soluciones”, manifestó el entrevistado, quien hizo hincapié en que la molestia se da no solo para quienes viven en la zona sino que es a la vez un factor de potencial riesgo para los rodamientos, (rulemanes) de los equipos de la planta.