Locales | 08 Jul El edil nacionalista Rubens Francolino planteó en el plenario de la Junta Departamental la iniciativa de un homenaje al payador argentino Gabino Ezeiza y sugirió para ello la fecha del 12 de octubre próximo, en el marco del año del bicentenario del nacimiento del Gral. Leandro Gómez y dado el respeto ganado entre nuestra gente al tomar en sus versos el rasgo de heroicidad de Paysandú.
Sostuvo, entre otros conceptos, que “para el mayor conocimiento de las nuevas generaciones, escolares y estudiantes en general, digamos que el 3 de febrero de 1858 nacía en San Telmo, Buenos Aires, quien después familiarizado con la política de su país por haber estado afiliado a la Unión Cívica Radical y ser admirador de su fundador Hipólito Irigoyen, se convertiría con el andar de los años en el más famoso payador rioplatense. Las postrimerías del siglo XIX eran el escenario propicio de payadas memorables en el marco de una intensa vida bohemia, donde cada artista tenía un núcleo de seguidores que los alentaban en contrapuntos que duraban horas y a veces días, hasta el momento en que uno de los contendores se rendía o un jurado (que a veces se constituía) declaraba vencedor a uno de ellos por su manifiesta superioridad en la improvisación”. Francolino sostuvo también que “cuando se hace referencia al origen del ‘Saludo a Paysandú’, como sucede frecuentemente la coincidencia no es total. Aunque la versión más difundida o anecdótica (me excuso por no ser historiador) dice que nació como resultado de un enfrentamiento con el mentado payador oriental Juan de Navas, también rodeado de una aureola de prestigio muy particular y con la ventaja de ser locatario. Tampoco habría coincidencia en la fecha, aunque algunos sostienen que fue a finales de 1884. El negro Gabino habría sido declarado vencedor de ese duelo de payadores, presenciado por una multitud en una cancha de frontón en el vecindario de la Plaza de los Treinta y Tres Orientales en Montevideo. Dicen que ante el ambiente poco amistoso del público oriental, luego de ganarle a de Navas, Gabino improvisó la que sería su célebre canción ‘Saludo a Paysandú’, recibiendo una ovasión que lo sacó de la difícil situación que se le presentaba”.
En paysandú
El edil señaló que “otra cosa que Paysandú debe recordar es que en la primavera de 1908 el payador, procedente de la vecina localidad de Colón, Entre Ríos, cruzó el río Uruguay y en la noche del 18 de setiembre se presentó ante un centenar de sanduceros en el Ateneo (hoy Centro Universitario de Paysandú)”. Recordó también Francolino que a principios de la década de 1960 presentó en la Junta Departamental el proyecto de un busto de Ezeiza, obra del escultor Blanco Villalta que en 1958 había donado a la Intendencia Municipal del nacionalista Carlos María Seoane, el historiador Agusto I. Schulkin. “Ese busto, finalmente, fue instalado en 1978 por el intendente Walter M. Belvisi en la Plaza Artigas y fue el 12 de octubre por ser el Día de la Raza, de la victoria de Sarandí y también el aniversario del fallecimiento de Ezeiza”.
“El busto, fue robado por los inadaptados de siempre que no tardaron mucho tiempo en constatar que era de bronce y por ende negociable al precio más vil. Desde entonces Paysandú, a los ojos del viajero, no tiene ningún testimonio de admiración al payador. Siempre he dicho -subrayó Francolino- que jamás me dejaré ganar por la decepción y por eso vuelvo sobre mis pasos para solicitarle a la Intendencia de Paysandú que promueva un justo homenaje al autor del ‘Saludo a Paysandú’ en este año que se recuerda el bicentenario del natalacio del glorioso Gral. Leandro Gómez, procurando la ubicación del yeso original de Blanco Villalta y una nueva fundición para retornarla a su sitio en Plaza Artigas”.