Paysandú, Lunes 18 de Julio de 2011
Opinion | 13 Jul Indudablemente los gobiernos a todo nivel necesitan tiempo para organizarse, para establecer sus prioridades y para llevar adelante sus planes. Y desde que representan el poder popular, refrendado mediante el voto, tienen derecho a establecer la forma en que deben reafirmar esa vía democrática de gobierno.
No obstante, debe considerarse prioridad mantener abiertas vías de comunicación entre gobernantes y gobernados para que estos últimos puedan hacer escuchar y valer sus voces. El gobernante no puede encerrarse en su escritorio porque no podrá entender el sentir popular, y eso hará vacío su accionar y el proceso de toma de decisiones.
Este gobierno departamental ha dado importancia a las comunidades que viven, trabajan y luchan en los pequeños centros poblados desparramados por todo el territorio sanducero. Recientemente ocupó varios días en recorrer decenas de localidades, desde las más populosas a las con menos habitantes. Sentados en una misma habitación, los ciudadanos hicieron oír sus reclamos y las autoridades las escucharon y prometieron acciones tendientes a solucionarlos.
No obstante, si bien eso ocurre en el interior del departamento, no pasa lo mismo en la ciudad capital, donde residen unas 85.000 almas. En la ciudad, el principal instrumento reside en las comisiones vecinales y en éstas la principal fuerza en la Comisión Departamental de Comisiones Vecinales (Codecove). Más allá que el proceso del Presupuesto Participativo (PP) pueda mostrarse como un instrumento de acercamiento a la población, es a través de las comisiones vecinales --y entre éstas la de la zona puerto es un notable ejemplo-- que los vecinos se expresan.
En Salto, aquí cerca, en estos días el intendente Germán Coutinho ha reconocido a unas cincuenta comisiones vecinales, que se formaron y están trabajando, generando un entramado de ideas y proyectos que benefician en primer lugar a la comunidad toda, pero sin dudas también facilitan el trabajo de los gobernantes. En Salto se ha creado además el Departamento de Comisiones Vecinales, la versión salteña de la Codecove y se trabaja en fortalecer los vínculos entre los barrios y la Intendencia.
En Paysandú, que se sepa, no hay planes concretos ni cortoplacistas. Y urge que los haya. Los vecinos de la ciudad también merecen ser escuchados, como lo merecen (y lo logran) los del Interior. Formar las comisiones vecinales es tarea de hoy. Aunque no aparezca en la agenda.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Jul / 2011
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com