Deportes | 19 Jul El sanducero Marcelo Romero integró una de las selecciones de básquetbol de Uruguay que participó recientemente del undécimo Campeonato Mundial de Maxibásquetbol disputado en la ciudad de Natal, en el Estado de Río Grande do Norte, al noroeste de Brasil, una zona muy pintoresca, con excelentes playas y 30º de temperatura todos los días.
El certamen se disputaba por edades, y por ejemplo Uruguay fue cuarto en la categoría mayores de 60 años y vice campeón mundial en mayores de 65 años.
Nos decía Romero “que es para resaltar desde el punto de vista humano, porque la expectativa de vida ha crecido, como personas de 83 años, Uruguay llevó cuatro jugadores de más de 80, en la categoría mayores de 70, caso de Bolaños que fue dos veces olímpico, se los veía entrar a la cancha y jugaban. Y por ejemplo, uno le decía al otro, nos toca contra Estados Unidos, y la repuesta fue, no te preocupes, les vamos a ganar corriendo. Incluso uno andaba con un baston para apoyo, pero en la cancha no lo utilizaba”.
¿Hubo una nota luctuosa?
“Sí, el fallecimiento de “Bocha” Caresani. Había estado dirigiendo un partido, se puso nervioso, fue al hotel. Un cardiólogo le recomendó que descansara, pero luego lamentablemente falleció. Quedamos muy mal. Venía una fiesta de premiaciones pero ninguno de los uruguayos concurrimos. Al otro día, se le hizo un homenaje. En esa reunión convinimos que el sentimiento de “Bocha” hubiera sido el de seguir participando, y así se resolvió”.
¿En cual categoría participaste?
“Mayor de 55 años. Participaban equipos de muchas partes, Los más difíciles fueron República Checa y Lituania, Arrancamos contra Brasil, después le ganamos a Letonia, también a República Checa B, y luego enfrentamos a República Checa A, un cuadrázo, todos muy altos, que realmente nos superaron. Despues algunos lesionados, pero anduvimos bien. Al margen de eso la oportunidad de reencontrarnos con Chacón el “Pato” Zanandrea, una cantidad de gente del básquetbol de antaño. Por otra parte una competencia muy fuerte, con excelentes jugadores, como Carioqhinio elegido la mejor figura. También jugó Israel aquel muy buen basquetbolista brasileño, mientras que fue designado como el mejor jugador de América, el argentino Miguel Cortijo, también uno de los grandes de su tiempo”.
Y prosigue Romero “fueron diez días de competencia. Me enganché porque me invitaron, jugué de titular, y la verdad que fue muy emotivo salir a la cancha y que gritaran arriba la celeste y vamos “Pato”... sentís la sangre en las venas y te motiva, la verdad que fue una experiencia de vida”.
El año próximo el Panamericao en Puerto Montt, dentro de dos el Mundial en Grecia. Lindo para estar no... “Y...” “Chapatín”