Nacionales | 20 Jul Por las redes sociales
En momentos de crisis hay que echar mano a todo. Y la política no es la excepción. Es por eso que en Asamblea Uruguay consideran necesario que se “abra el debate a los frenteamplistas de todo el país a través de los medios electrónicos”, es decir, las redes sociales.
El diputado Carlos Mahía dijo a Últimas Noticias que los sucesos en el Frente Amplio son el reflejo de un problema de “base”, que no se va a solucionar con una instancia de discusión como la que mantiene la Mesa Política, sino a través de un debate “a lo largo y ancho del país” que involucre a la mayor cantidad de gente posible. Y para hacer esto, el sector entiende necesario promover “una actitud proactiva en toda la comunicación de las redes sociales” y hacerlo como una “decisión política”.
Se debe señalar que los partidos tradicionales ya tienen en claro el uso de las redes sociales para comunicarse con los medios y los militantes, pero el Frente Amplio todavía no lo ha hecho, aunque algunos legisladores, como el diputado Alfredo Asti y José Mahía, ya se comunican con los frenteamplistas a través de Facebook.
Unidad de acción
Y siguiendo con los problemas internos que enfrenta el Frente Amplio, el editorialista del semanario “El Popular” del Partido Comunista reconoce que el principal tema en debate en la izquierda debe ser la unidad y que la falta de esta afecta negativamente a la coalición.
“Uno no puede dejar de coincidir con los compañeros Mujica y Astori; es absolutamente cierto que la falta de unidad de acción amerita una discusión ideológica profunda. Como bien dice nuestro vicepresidente, la falta de unidad de acción deja consecuencias negativas para el Frente Amplio. Y es que el FA ha basado su accionar histórico justamente en ese factor, que ha sido clave en la continuidad del proyecto político de transformaciones profundas para este país. Los sectores que en su momento conformaron el Frente Amplio, tenían diferentes visiones sobre determinados temas, pero acordaron en la mayoría de las cosas que se comprometían a llevar adelante”, afirma José Luis Perera en el editorial.
“Trampas al solitario”
Señala que una de las claves de la unidad de acción es que “esté basada sólidamente en acuerdos programáticos. A nadie escapa que la izquierda históricamente ha tenido coincidencias en los grandes temas que hacen al avance en democracia hacia mejores condiciones de vida para el pueblo, y que suele haber puntos de vista, enfoques, matices, y hasta profundas diferencias a la hora de las propuestas concretas”. Pero “una vez que llegamos al gobierno, este asunto se complicó, porque ahora había que llevar adelante aquello en lo que aparentemente estábamos de acuerdo, y entonces los desacuerdos instrumentales pasan a ser el centro de la cuestión”, admite.
Para el editorialista, desconocer este hecho “es hacerse trampas al solitario”. “La forma de resolverlo es el respeto de los acuerdos programáticos y la discusión amplia y fraterna de las medidas concretas. Discusión que --en algunos temas-- no puede darse en los ámbitos cerrados del gobierno ni en el de la bancada parlamentaria, sino que debe ser amplia y profunda y en los organismos de la fuerza política”. “La presentación de proyectos surgidos no se sabe dónde, y presentados en sociedad en consultoras extranjeras antes que en la fuerza política, no es un buen método para llevar adelante un gobierno del Frente Amplio. Quienes integramos esta fuerza política nos merecemos otra cosa”, acota.
El más conocido
Según una encuesta de la consultora Datamedia, Eduardo Bonomi es el ministro más conocido por la ciudadanía, con un 78% de reconocimiento, mientras la cesante titular del Mides, Ana Vignoli, se encuentra en el otro extremo con un 4,6%. El ministro de Turismo, Héctor Lescano, es el que tiene mayor aprobación.
La empresa Datamedia dio a conocer un ranking de ministros de acuerdo al conocimiento de la población. Según la consultora, el ministro más conocido --lo que no significa el más popular-- es el del Interior, con 78,2%. En el otro extremo se encuentra Vignoli, la ahora ex ministra de Desarrollo Social, con un 4,6%. Después de Bonomi, vienen Luis Rosadilla (Defensa, 63,4%), Luis Almagro (Relaciones Exteriores, 54,4%), Fernando Lorenzo (Economía, 52,3%), Héctor Lescano (Deportes y Turismo, 51,5%) y Enrique Pintado (Transporte, 45,3%).
En cuanto a los ministros con mayor aprobación, Héctor Lescano, de Deportes y Turismo, tiene el primer lugar con un 71,5%. Luego vienen Fernando Lorenzo (Economía, 58%), Enrique Pintado (Transporte, 56,5%), Tabaré Aguerre (Ganadería, 55,1%) y Daniel Olesker (Salud Pública, ahora en el Mides, 49,9%). Según la consultora, el 84,9% de la ciudadanía conoce al menos el nombre de un ministro pero sólo el 60,4% puede nombrar dos, según los datos recogidos por la agencia Uypress.