Deportes | 20 Jul Festejó y ya comenzó a pensar en la final del domingo próximo. Uruguay sabe que queda un paso, el último, para alcanzar el objetivo de volver a alzar la Copa América después de muchos años. Y la oportunidad llegó después de vencer a Perú en semifinales. “Conseguimos el pasaje a la final. Era un partido difícil pero merecidamente lo tenemos. Creo que prácticamente no ocasionaron chances de gol y fuimos justos ganadores”, reflexionó el capitán Diego Lugano, quien terminó algo dolorido de un tobillo.
Fernando Muslera, que tuvo un par de contenciones importantes, afirmó por su parte que “jugamos mucho mejor, controlamos el partido y fue una victoria merecida. Se gana por efectividad, pero hicimos mérito y metimos todos para llevarnos una victoria. Estamos a un paso, tranquilos, y ahora hay que jugar el partido de nuestra vida”.
El golero agregó con respecto a su actuación, que “dentro de todo vengo teniendo un buen campeonato y espero que se repita en la final. En este campeonato me sentí mucho mejor, tranquilo, aprendí de los errores y eso me pone contento”.
“Este grupo está bien, pudo complicarse el partido por la cancha, porque por momentos se podía hacer buen fútbol, y por momentos no. Hacía muchos años que no le ganábamos a Perú por la Copa América”, dijo Martín Cáceres, quien dijo que se cuidó “de que no me sacaran otra amarilla, lo que había hablado con Tabárez”. Mientras Sebastián Coates aseguró que “no tuvimos errores, que era lo más importantes, y después fuimos contundentes”, el sanducero Egidio Arévalo Ríos dijo que “logramos lo que veníamos a buscar y ahora tenemos que descansar y esperar por el rival”.
El “Cacha” agregó que “la cancha estaba imposible, pero era para los dos iguales, por lo que teníamos que estar ordenados y tratar de jugar para dársela a los de arriba, que saben lo que tienen que hacer. Perú fue difícil: tuvo un cambio enorme y será complicadísimo en las eliminatorias”.
Alvaro Pereira, quien cada vez más colabora en la ofensiva, dijo tras el triunfo que “uno intenta aportar al equipo, que está fuerte, sabe lo que quiere y tiene hambre de gloria. ¿Cuál es la clave de Uruguay? Trabajamos bien y cuando estamos en una instancia de éstas el hambre de gloria va más allá de todo”.
“Entré a colaborar en la mitad de la cancha e intentar cerrar el partido. No podíamos especular en nada y creo que seguimos creciendo día a día. Sabíamos lo que teníamos que hacer, a veces no hay que jugar bien sino ganar”, dijo por su parte Sebastián Eguren.
Pensando en el futuro, el volante afirmó que tanto Paraguay como Venezuela “serían grandes rivales. Paraguay tiene mucho oficio y Venezuela viene creciendo y jugando a gran nivel”.