Nacionales | 27 Jul Preocupa a las autoridades de la Salud la diferencia de disponibilidad de camas en áreas críticas entre el sector público y privado. El Espectador adelantó cifras de un relevamiento efectuado por Salud Pública, donde se establece que en Uruguay existen 935 camas en áreas críticas, lo que incluye cuidados intensivos, cuidados intermedios, unidad cardiológica y unidad de quemados. De ese total, 195 corresponden a ASSE y 88 a otros hospitales públicos, como el Militar.
El criterio internacional señala la necesidad de contar con una cama en áreas críticas cada 10.000 personas y según el presidente de la Junta Nacional de Salud (Junasa), Luis Gallo, Uruguay está dentro de los parámetros adecuados, pero preocupa la diferencia entre el sector público y el privado. “A grandes rasgos los números darían. Hay un gran desbalance entre el sector público y el privado. Hay 1.600.000 usuarios que están en el Fonasa que tienen 645 camas y 1.200.000 personas que tienen 195 camas. ASSE necesita camas, esa es la primera conclusión”, sostuvo el jerarca basándose en los resultados del relevamiento, efectuado por el Ministerio de Salud Pública tras el fallecimiento de cuatro personas que aguardaban por una cama en cuidados intensivos, tres en Montevideo y una en el Interior.
Gallo señaló además la necesidad de “reestructurar, diseñar una estructura general de lo que tiene que ver con cuidados intensivos, para que un paciente de Durazno no termine en un CTI de Rivera”, aunque negó que se esté ante una situación crítica. “Estamos en una realidad en la cual hay una población que envejece más, nacen menos niños y envejecen más rápido; una población con más enfermedades, situaciones de cambio climático que afectan la salud de las personas. En invierno las camas de CTI aumentan y la demanda es mayor. De todas formas no son momentos críticos”, afirmó.
Asimismo, el jerarca adelantó al referido medio que en unos 15 días la Comisión Honoraria Asesora en Medicina elaborará un extenso informe en el cual se darán detalles de la cantidad de camas en áreas críticas, la cantidad de enfermos y cuáles de ellas están ocupadas.