Paysandú, Sábado 30 de Julio de 2011
Deportes | 25 Jul Luis Suárez no podía contener la sonrisa. Primero recibió el premio al mejor jugador de la Copa América, y luego se sumó a los festejos con el trofeo levantado por el capitán Diego Lugano. El autor del primer gol de la final dijo tras el partido que “los premios individuales se deben al equipo, y me gusta disfrutarlos con mis compañeros”.
El delantero salteño afirmó que “para una selección lo mejor es tener una tarde redonda como hoy. Salimos decididos a convertir rápido y se dio, para jugar más tranquilos, aunque bajamos los decibeles en el complemento porque Paraguay quiso reaccionar, pero hicimos un gran esfuerzo, somos un grupo adentro y afuera de la cancha, y por eso se logran estas cosas”.
Para Suárez el partido más duro de la Copa fue “contra Argentina, que jugó bien y tuvo situaciones. Fue el rival que nos creó más peligro, pero demostramos ganas y jerarquía, y la entrega máxima fue fundamental para llegar al objetivo central de ser campeón”.
El jugador del Liverpool agregó que “seguimos demostrando que tenemos jerarquía y un grupo muy unido”, en tanto afirmó con respecto a la final que “en este tipo de definiciones abrir el partido es importante, lo buscamos desde el primer momento porque sabíamos lo que nos jugábamos, y que enfrentábamos a un buen rival”.
Forlán, tercera generación
Diego Forlán, por su parte, afirmó que “era un partido complicado pero el equipo estaba bien, y ese primer gol en forma temprana creo que condicionó el partido”. El delantero, que cortó la seguía de gol de un más de un año con la camiseta celeste (su última anotación fue ante Alemania, en el Mundial 2010), se dio el gusto de festejar por partida doble.
“Hasta el maestro (Tabárez) me fue a saludar, me sorprendió. Pero hay un cariño enorme entre todos, y es fruto del trabajo, sacrificio y respeto que nos tenemos todos. Si no hacía un gol igual estaba feliz, aunque para todo delantero es lindo hacer goles. Creo que la gente tenía más ganas de que yo hiciera un gol”.
Por otra parte, Forlán dijo sentir un orgullo enorme por “ganar este título al igual que lo ganó mi abuelo y mi padre, por lo que los apellidos Corazzo y Forlán entran en la historia”.
“¿Qué fue lo mejor que tuvo Uruguay? La tranquilidad. Partido a partido sabíamos que íbamos a sufrir, pero respetamos a todos los rivales. Esta final se dio así, entramos bien, tuvimos un par de situaciones y ese primer gol fue clave”.
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