Nacionales | 01 Ago La Policía incrementó el patrullaje a caballo y a pie en los barrios Centro, La Comercial, y Cerro de Montevideo, informó el ministro del Interior, Eduardo Bonomi. Desde hoy, efectivos de Investigaciones se repartirán en tres grupos a las órdenes del jefe de cada zona. Bonomi recordó que no recomendó a la población que se arme.
Ante la muerte de comerciantes que intentaron con el uso de armas impedir asaltos en sus locales, el ministro mencionó que actuar por mano propia sólo agravaría el problema. “Nadie que se plantee solucionar el tema por mano propia lo va a solucionar; solos u organizados tampoco lo van a solucionar, el problema tiene una dimensión mucho más grande”, dijo. “No puedo recomendarle a nadie que no sepa usar un arma que se arme, ni puedo recomendarle usar un arma a quien está autorizado, porque para usarla tiene que tener la autorización correspondiente”, dijo el ministro del Interior. Indicó que “saber usar un arma no es solo saber disparar, sino también saber cuándo sacar el arma, cuándo no usarla, cuándo aguantarse las ganas porque a veces la Policía, que está entrenada para eso, no saca el arma”. “El que lo enfrenta tiene el arma en la mano y lo rodea, ahí sacar el arma es suicida”, añadió.
Para Bonomi, la seguridad no siempre tiene una dimensión exclusivamente dependiente de la Policía, también tiene una dimensión que surge de la educación, la vida en familia, las instituciones educativas. Dijo que habría que buscar desde el punto de vista de las soluciones a mediano y largo plazo. “De lo único que estamos hablando en este momento es de las condiciones a corto plazo, pero también hay que hablar sobre las soluciones de fondo”, aseguró.
Acerca de las palabras del director Nacional de Policía, Julio Guarteche, en la Comisión de Constitución y Legislación de la Cámara de Senadores, Bonomi aclaró que el ministerio no realizó ninguna encuesta, que es un trabajo hecho en el período anterior y publicado en la prensa y que algunos adolescentes respondían por ese ítem, como otros decían otra cosa, “como contratistas de fútbol”, ejemplificó. Guarteche dijo en el Parlamento: “Hace poco se hizo una encuesta en la que se preguntaba a los menores qué querían ser cuando llegaran a adultos. La respuesta que más se repitió fue que querían ser narcotraficantes. Eso es muy preocupante, ya que es al narcotraficante a quien ven como modelo”.
Por otra parte, Bonomi indicó en qué etapa se encuentra el análisis de la posibilidad de imponer penas alternativas a los condenados por tráfico de pasta base, específicamente la prisión domiciliaria, con vigilancia permanente y asistentes sociales. Informó que el trabajo actual de la comisión que está encargada de este tema es ajustar el concepto sobre su conveniencia o no.