Rurales | 03 Ago El temporal de agua y frío del lunes, acompañado por momentos de viento fuerte, generó preocupaciones a nivel de los productores agropecuarios del departamento, que debieron soportar alrededor de 70 milímetros, impactando fundamentalmente en los ovinos recién esquilados y la majada en parición.
Los productores coinciden en que es más beneficiosa la lluvia que la seca, y mejor aún si las precipitaciones se verifican al ingreso de la primavera, pero también entienden que temporales como los del lunes son realmente nefastos para la pecuaria, y en especial en las categorías de animales que no han pasado bien el invierno. Productores de la región en plena parición de la majada, se encontraron con la muerte de algunos corderos que precisamente nacieron en horas previas o durante las horas de la inestabilidad climática. Carlos Artía, de la zona de Paso del Parque, al norte del departamento, dijo a EL TELEGRAFO que la noche “es realmente complicada para los productores que tienen campos pelados y con ovejas que no presentan muy buen estado y que deben afrontar la muerte de corderos”.
Agregó que para “aquella oveja que tiene corderos con tres o cuatro días la situación es distinta, pero recién nacido y mojado --con este frío-- es realmente complicado”. La esquila en el establecimiento “El Atalaya” se ha realizado con peine alto “y no he tenido mortandad de ovejas por no tener capas”, explicó Artía. De todas formas, reconoció la importancia de una buena alimentación en las ovejas, definiéndola como “la base”, a pesar de indicar que no todas las situaciones son iguales y hay productores que hoy están complicados por la falta de comida para sus animales.
Entiende que “es una lástima”, porque era un invierno “que venía lindo y con los campos con un poco de pasto”. Subrayó que actualmente uno de los problemas importantes es el de la caminería. “Si era feo antes de la lluvia, imagínense ahora como está”, comentó. “Desde hace varias semanas que esperamos al camión para levantar la lana y no hay esperanza de levantarla”. A la imposibilidad del ingreso del camión para levantar la lana, se suma el de la ración, que tampoco puede hacerlo. “Si el camión no ingresa en verano, después es imposible”, dijo.
Tambos
Los tambos de la región no escapan a las complicaciones del clima. Julio de 2011 ha sido de los meses más problemáticos de los últimos años, con una seguidilla de heladas --temperaturas que oscilaron entre -5 y -9 grados sobre césped--, extendiéndose desde el primer día hasta el 7 inclusive.
Si a eso se le suman alrededor de 90 milímetros a mediadoS de mes y lo acontecido este lunes, los problemas se agudizan. Matías Manito, un joven productor lechero de la zona de Guaviyú, comentó a EL TELEGRAFO que el ganado “está sintiendo mucho el frío y la lluvia. Además, por más urea que utilicemos para la avena, la misma no viene por las bajas temperaturas”. Los tamberos deben disponer de buen alimento para el ganado o de lo contrario la merma en la producción se hará sentir en los bolsillos.
registros
Los registros pluviométricos del lunes fueron generales en todo el departamento. De acuerdo a lo aportado por productores a EL TELEGRAFO, el mayor guarismo fue en la Colonia José Batlle y Ordóñez con 81 milímetros; en Arroyo Grande 80, Paso del Parque y Buricayupí 75, Guarapirú 70, Merinos 62, Guichón 60, Guaviyú y Arroyo Negro 55, Piñera 52 y Constancia 45. Los datos brindados por Jefatura de Policía de Paysandú, desde las 7 del lunes hasta las 7 del martes, indican que en ciudad fueron 73 milímetros; Guichón 68, pueblo Porvenir 66, El Eucalipto 65, Chapicuy 60, Quebracho 56, Piedras Coloradas 50 y Tambores 34.