Afectaría a Montevideo

Locales | 02 Ago Mientras que en todo el país hay una gran demanda de supergas --así como de otros combustibles-- fundamentalmente para la calefacción, los empresarios fleteros de las garrafas de gas licuado de petróleo ocuparon ayer las plantas de Acodike y Riogas --que a su vez envasa para Ancap- en reclamo de la negociación de nuevos contratos laborales.
Los dueños de los camiones y camionetas que distribuyen supergas bloquearon en la tarde de ayer las plantas de Acodike y Riogas en La Tablada, en protesta por demoras en la firma de nuevos contratos de servicios.
Quienes participaron del conflicto son los pequeños fleteros de la capital, que bloquearon el acceso y la salida de las plantas para que los grandes camiones tampoco puedan llevar garrafas a los centros de distribución. En la tardecita de ayer hubo una nueva asamblea en la que los fleteros decidieron continuar con los cortes. El conflicto se hizo público ayer con la medida de fuerza, pero desde hace varios días los camioneros reclamaban mejorar su participación en el negocio.
SOLUCIÓN
EN VISTA
Anoche el gerente de Riogas S.A., Gustavo Graña, dijo a EL TELEGRAFO que “estamos trabajando en una solución, es muy viable que se levante este conflicto”. Por otra parte, el gobierno se preocupó por el tema y citó a las partes a una reunión esta mañana a las 9 en la sede del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.
De todas maneras, y si bien no hay escasez de supergas, la alta demanda que se registró en casi todo el país --y que en Paysandú llevó a que entre el domingo y ayer casi se agotaran las existencias en algún distibuidor-- puso en alerta a varios representantes de supergas para reforzar sus depósitos. Los locales que pudieron ver resentido el servicio de garrafas, particularmente las de 13 kilos, están en Montevideo, que es donde reparten las camionetas y pequeños camiones que son objeto del reclamo. Hacia el Interior salen otros camiones que en general son de las mismas empresas envasadoras, por lo que no hay conflictos y se mantiene la distribución con normalidad.
Lo que podría afectar es que se corte la salida de garrafas desde las plantas hacia cualquier destino. En Montevideo, los fleteros garantizaron el servicio a hospitales y hogares de ancianos, así como a otros centros en los que no puede faltar el gas.