Locales | 08 Ago En el Salón Comunal de Mevir en Quebracho se suscribieron las escrituras que otorgan la propiedad de veintisiete viviendas del Plan I a otras tantas familias que han completado el pago. En el acto participó el presidente del organismo, Arq. Francisco Beltrame y el vicepresidente, Esc. Ariel Díaz, quienes suscribieron la documentación junto a los propietarios y sus respectivos escribanos.
Finalizado el acto, Beltrame expresó a EL TELEGRAFO haber venido a “cumplir con un compromiso asumido por otra comisión, al igual que han cumplido con el organismo pagando en tiempo y forma estos participantes, y los honramos asumiendo el costo de las escrituras que serán de cargo de Mevir”.
Reconoció que “el organismo había estado un tanto omiso en tema escrituras. En 2008, cuando asumimos, tomamos conocimiento que en la historia de Mevir se habían hecho 250 escrituras. Nos propusimos regularizar todos aquellos aspectos que estaban en situación irregular y proceder a la mayor cantidad de escrituras posibles y en los dos últimos años, hemos concretado más de mil escrituras”. Esto ocasiona un doble efecto: “por un lado el entregar la vivienda y el título, y desmitificar aquello de que ‘éstos son unos mentirosos’ y se cumple en la misma forma que intentamos” el cobro “de deudas, para seguir haciendo obras”.
“También honramos los compromisos escriturando” a aquellos que pagaron, agregó Beltrame. “Si nos reclamamos mutuamente, las obligaciones y responsabilidades que tenemos entramos en círculo virtuoso que posibilita el desarrollo”, dijo.
nuevos planes en Quebracho
Respecto a nuevos planes para Quebracho y su entorno, Beltrame dijo que hay “dos puntos a destacar. Por un lado hay voluntad de la Comisión Nacional, ya expresada y aprobada de intervenir en la localidad de Quebracho con un programa de núcleo pero hay una dificultad: no encontramos tierra categorizada como urbana o suburbana y no podemos construir núcleos habitacionales en suelos que no estén previamente categorizados”
Aclaró que “la obligación de la categorización es una competencia de las intendencias en cualquier parte del país. A nivel de Paysandú, ya ha hecho un análisis y hemos acercado la información que desde Mevir podíamos brindar con respecto a predios propiedad de Mevir o privados que pudieran ser comercializados y se ajusten a términos que nosotros entendemos razonables, pero la última palabra la tiene la Intendencia”, que lo tendría “en estudio e incluso pasa por una comisión de la Junta Departamental. Estamos empujando y colaborando para que esto pueda concretar al más corto plazo”.
Aclaró que en la zona “estamos trabajando en la modalidad de unidades productivas, procediéndose a la inscripción en las zonas de Santa Kilda y Arroyo Malo, estando en la parte de análisis técnicos”, manejándose en “esas dos zonas unas doce para cada una de ellas” totalizando “unas veinticuatro intervenciones que o son de vivienda o de mejoras prediales o bien de infraestructura productiva”, pudiendo aumentar en caso “que haya más participantes que cumplan los requisitos técnicos”.
Las viviendas para Quebracho “son para nosotros una de las actividades prioritarias. En 2005 hicimos un análisis de prioridad en el Departamento y a Quebracho lo teníamos en un segundo orden”, pero al cumplirse “prácticamente con todas las otras prioridades, las viviendas para Quebracho ya son de prioridad y primer orden, recordando que deben darse las otras condiciones y requisitos para poder definir y decir sí, ahora”. Finalmente, aclaró que “no nos gusta anunciar sin tener ‘pájaro en mano’. Tenemos la voluntad, tenemos los recursos, pero debemos superar estos inconvenientes de definición de la categoría del suelo para poder definitivamente actuar. La Intendencia comparte estas prioridades pero debemos esperar cuando esto se transforma en definición”.