Locales | 07 Ago Entre las modificaciones que se han concretado con el curso de los años en Mevir figura como un aspecto que ha ganado terreno la construcción de las denominadas unidades productivas, que tienen como ventaja promover el afincamiento del hombre de campo en determinados lugares, teniendo en cuenta el carácter muchas veces cambiante de las oportunidades de empleo en el medio rural.
Así lo indicó a EL TELEGRAFO el presidente del organismo, Arq. Francisco Beltrame, quien señaló que “esta es una línea que intentamos potenciar a lo largo del período pasado. Esto es así porque en primer lugar creemos que todo ciudadano de este país tiene que tener el mismo derecho al acceso a los distintos bienes. Muchas veces políticas que no priorizan el trabajo en el medio rural, lo que producían indirectamente era que para poder acceder a un techo digno, a una fuente de agua segura, a los beneficios que implica sin dudas por ejemplo el contar con energía eléctrica, las familias debían desplazarse en el territorio para tener acceso a estos bienes”.
Precisó asimismo que “como todos sabemos, este desplazamiento a las ciudades no asegura nada, y todos conocemos cuál es la situación que se da también en las ciudades desde el punto de vista de la marginación, porque puede resultar que no hay tampoco respuesta efectiva ahí. Pero a la vez se produce un desarraigo fuerte en lo que tiene que ver con costumbres, en la posibilidad de tener trabajo en función de lo que uno sabe hacer. Por lo tanto para la afirmación de las familias rurales que tienen vocación para quedarse y para desarrollar el trabajo, debemos asegurar el acceso a esos bienes a los que tiene derecho como ciudadanos”.
Infraestructura productiva
“Por lo tanto ésta es también una apuesta importante, porque no es solo una respuesta de vivienda la que se da en los programas de unidades productivas, sino que involucra algunos elementos de infraestructura productiva del predio que permiten optimizar estas capacidades que hay de generación de riqueza, a partir de la producción de los predios”.
“Quiere decir que el poder afincar efectivamente en condiciones dignas las familias del medio rural tiene un motivo de acceso directo a estos bienes y a su vez la potenciación del trabajo que pueda realizar la familia”, destacó el jerarca.