Deportes | 15 Ago En los últimos minutos del partido que Danubio ganaba como local por 1 a 0 frente a Wanderers, el árbitro Fernando Cabrera expulsó al brasileño Diogo, recién llegado a filas bohemias. El futbolista no soportó que los jugadores de Danubio retuvieran el balón sobre el banderín del córner, y tiró varias paradas que no fueron precisamente a la pelota, lo que motivó que el asistente Fernando Ríos lo denunciara ante el árbitro, que le mostró la roja.
Y ardió Troya: el brasileño le pegó una cachetada a Ríos y se fue llorando al vestuario. En ese momento, pese a que quedaba un minuto de los descuentos por disputarse, cabrera decidió dar por finalizado el pleito. Y Ríos, luego de irse del Estadio Jardines del Hipódromo, realizó la denuncia ante la Seccional 16ª de la Policía, declarando no solo que el jugador lo cacheteó, sino que también lo escupió.
Ahora no solo se espera por conocer cuál será la dura pena que recibirá Diogo, sino que apenas terminado el partido los dirigentes de Wanderers comenzaron a evaluar la rescisión del contrato que liga al club con el jugador.