Opinion | 21 Ago La Liga de Fútbol de Paysandú está celebrando los cien años de su creación.
El pasado 11 del presente mes de agosto, fecha en que se cumplió el centenario, se realizó el primer acto de la programación establecida. En tal oportunidad, como informáramos, se dio a conocer un resumen de los éxitos deportivos y logros institucionales que la Liga ha obtenido a lo largo de este siglo de vida. A su vez, hicieron uso de la palabra, entre otros, el Intendente Departamental y el actual Presidente de la institución.
Resulta casi apabullante, podríamos decir, la extensa nómina de títulos obtenidos por las representaciones futbolísticas sanduceras en los torneos regionales, nacionales e internacionales.
Y, si bien las victorias con la esencia misma de la práctica del deporte, no resultan menos importantes los logros institucionales obtenidos en estos cien años. Desde el momento mismo de su constitución, la Liga es una trascendente manifestación al aglutinar los clubes que ya practicaban el “foot ball” en Paysandú desde 1903, cuando se disputó el primer partido “formal” en la cancha de Libertad, en Bulevar Artigas e Ituzaingó, siendo en esa oportunidad que Pedro J. Etchemendy marcó el primer gol “oficial” en la historia de este deporte en Paysandú.
Posteriormente se sucederían los logros institucionales al crear y organizar el primer Campeonato del Litoral, para continuar marcando una presencia de liderazgo en el fútbol nacional y, muy especialmente, en la organización del Interior de nuestro país.
Luego, hubo momentos culminantes con la participación de la Liga sanducera en la organización en Paysandú de “llaves” de torneo de la importancia del Campeonato Mundial Universitario, Sudamericano Juvenil y, fundamentalmente, en una de las sedes de la Copa América en 1995.
Fue en esta oportunidad en que se pudo apreciar especialmente los grandes beneficios que la realización de este tipo de actividades aporta a la ciudad, el departamento y la región.
En su discurso del pasado día 11, el presidente de la Liga de Paysandú, Cr. Nelson Manzor, expresó entre otros conceptos: “hoy es momento de festejos, de recordación, pero también de compromiso y reflexión, porque debemos pensar hacia qué fútbol queremos ir”, resaltando luego su compromiso con el fútbol, “por las instituciones, porque queremos tener clubes fuertes para tener una liga fuerte”.
Y esto es precisamente lo que Paysandú necesita, una Liga fuerte, organizada y fundamentalmente, con una potente presencia en los ámbitos directrices del futbol uruguayo.
Aclaremos porqué apuntamos tal necesidad en este sentido. Tras el Gobierno Departamental, la Liga de Fútbol debe ser una de los principales soportes en la obtención y concreción de eventos deportivos de nivel mundial. Entonces, cuando se maneja por parte de las autoridades nacionales, del gobierno y del fútbol, el interés en organizar en el año 2030, conjuntamente con Argentina, el Campeonato Mundial de Fútbol celebratorio de los cien años del primer evento de este tipo realizado en el Uruguay, Paysandú aspira a ser organizador de una de las sedes del evento más importante del balompié local.
En consecuencia, el Gobierno Departamental, que seguramente llevará adelante la iniciativa debe contar con un “socio” de valor en el seno de la organización nacional del fútbol uruguayo.
Seguramente, la acción conjunta de estos y todos los otros actores departamental podrá lograr una “victoria” que permita a Paysandú disfrutar de los enormes beneficios que aporta un acontecimiento de de la naturales de un Mundial de Fútbol.