Policiales | 31 Ago La Justicia dejó en libertad a una mujer de 42 años que admitió su responsabilidad al haberse desprendido de un feto de cinco meses, hecho acaecido meses atrás en una finca del barrio P 3.
Mediante una denuncia anónima radicada en la Seccional Segunda, la Policía pudo saber que en una precaria vivienda emplazada en las inmediaciones de Setembrino Pereda y Diagonal 200 había tenido lugar un aborto y que el feto había sido arrojado en el inodoro. De inmediato, los actuantes se dirigieron al lugar señalado y efectuaron una inspección pero no lograron hallar ningún indicio que les permitiera dilucidar el caso.
En tanto, fuentes extraoficiales confiaron a EL TELEGRAFO que la familia que habitaba dicha finca se había mudado hacía poco menos de diez días. Citada la denunciada, habría manifestado que hacía unos cinco meses, cuando cursaba un embarazo de 20 semanas, sufrió un aborto espontáneo en el baño de su casa y luego arrojó el feto y la placenta en el inodoro. Agregó que no concurrió al médico y se automedicó con antibióticos y Aspirina.
Ante esto, la Justicia resolvió que la mujer --que tiene 15 hijos-- fuera conducida a la sede penal a efectos de declarar. Finalmente, el magistrado actuante decidió dejarla en libertad.