Nacionales | 09 Sep La respuesta del gobierno al abuso por parte de cascos azules uruguayos contra un haitiano “ha producido una gran admiración internacional”, aseguró el representante especial del secretario general de las Naciones Unidas en Haití, el chileno Mariano Fernández. En tanto que representantes de los países sudamericanos que aportan tropas en la misión de paz de la ONU en Haití decidieron recomendar la reducción de los efectivos al nivel anterior al sismo de 2010.
“Hay una gran admiración por Uruguay por la rapidez, la generosidad, la inteligencia, drasticidad de las medidas y la humildad del gobierno uruguayo, reconociendo y asumiendo la representación de su país en una situación difícil, que muchas veces otros pretenden eludir”, dijo Fernández al arribar a un encuentro de representantes de los países sudamericanos que aportan tropas en la misión de paz de la ONU en Haití. Fernández elogió “la rapidez para tomar decisiones y la completa disponibilidad de investigar a fondo y de producir sentencia sobre estos abusos”.
“Desde el punto de vista de las Naciones Unidas esto es inaceptable independientemente de los hechos exactos que hayan ocurrido, que tendrán que probarlos los jueces, porque tenemos un código de conducta que convierte en falta grave e incompatible con Naciones Unidas por ejemplo el ingreso de gente civil a los cuarteles contra su voluntad o por su voluntad”, enfatizó el jefe de la Misión de Estabilización de la ONU en Haití (Minustah). Añadió que está “descartado” el retiro de las tropas uruguayas por este episodio, destacando que “la responsabilidad penal siempre es individual”. Los primeros resultados de las investigaciones efectuadas en Haití por la Armada y el Ministerio de Defensa, junto con datos de las pesquisas efectuadas también por la ONU, sobre los abusos a los que fue sometido el joven haitiano por cascos azules uruguayos, grabada en video y difundida en Internet, descarta la violación aunque reconoce una “mala conducta” de los militares. Los detalles se filtraron a raíz de que la directora general de Servicios Sociales del Ministerio de Defensa, Gabriela González, los presentara en la Comisión de Defensa de Diputados, cuando fue convocado el ministro Eleuterio Fernández Huidobro, para explicar lo sucedido. En tanto que Amnistía Internacional pidió a Uruguay que facilite y lleve a cabo investigaciones “independientes, imparciales y exhaustivas” sobre los supuestos abusos cometidos por algunos de sus cascos azules en Haití y que indemnice a las víctimas. Indicó que si se confirman los abusos “el Estado uruguayo debe asegurar que la víctima reciba una reparación integral consistente con el perjuicio sufrido”.
Por otra parte, la portavoz de la Minustah, Eliane Nabaah, manifestó en Puerto Príncipe “el pesar” del organismo “a las víctimas, al pueblo haitiano y al gobierno”. Aseguró que la misión de la ONU se haría cargo de las víctimas de los abusos ofreciéndoles un apoyo médico y, eventualmente, material y financiero. “Los actos de algunos tuvieron por desgracia el efecto de empañar las acciones de miles de otros militares, policías y civiles que sirven a la Minustah y a Haití de forma irreprochable desde 2004”, declaró en la sede de la misión en Puerto Príncipe.