Locales | 09 Sep La recientemente nombrada delegada sindical de la Asociación de Empleados y Obreros Municipales (Adeyom), Ana Sosa, denunció “persecución” de parte de la alcadesa de Guichón, Lourdes Suárez y del capataz y recientemente expulsado de Adeyom, Teófilo Sosa. Esto motivó una rápida gestión de Adeyom ante el intendente Bertil Bentos, aunque la situación es compleja en la medida que Suárez ostenta un cargo electivo.
Ana Sosa contó que “se me ha ordenado” desde ayer “salir a barrer calles”, cuando su tarea anterior era la de limpieza de dependencias municipales, como auxiliar de servicio. No obstante, EL TELEGRAFO pudo saber que asiste derecho al Municipio de Guichón de cambiar a esta otra tarea. Sin embargo, Ana Sosa contó que ayer “me encontraba barriendo en la zona de la plaza” Williman “y ante una necesidad fisiológica que no podía postergar y al encontrarme muy lejos del corralón concurro a los baños de la cancha de Cenca, patio trasero de radio Paz. Al salir el señor Teófilo Sosa estaba en la puerta y me impidió salir y llamó a la alcaldesa, quien llega rápidamente para ´constatar´ la gravedad de mi falta”.
De acuerdo a lo expresado por Ana Sosa, fue “amenazada nuevamente por parte de ambos de que se tomarán las medidas sancionatorias correspondientes” y aseguró que “de esta forma se me hace muy difícil trabajar”, en tanto entiende que esta “persecución” se debe “a que me designaron delegada suplente ante el sindicato”.
Miguel Fortunato, secretario general de Adeyom, destacó que “esto confirma lo que expusimos” frente al intendente Bentos, “de las persecuciones que son objeto nuestros compañeros en Guichón y deja en evidencia que si nosotros dábamos nombres de los denunciantes”, que terminaron con las dos expulsiones de los ahora ex dirigentes de la subcomisión de Adeyom, “habría represalias”.
“Apelamos a la urgente intervención” de Bentos, dijo Fortunato para desactivar “estas actitudes desterradas desde hace mucho tiempo”.