Deportes | 19 Sep Floyd Mayweather, que junto a Manny Pacquiao disputan el cetro del mejor boxeador libra por libra de la actualidad, se quedó con otro cinto mundial, el Welter del Consejo Mundial de Boxeo, al vencer en una polémica pelea a Vicente Ortiz en el MGM de Las Vegas. Es que Mayweather noqueó a Ortiz, que llegaba como campeón, cuando éste se disculpaba tras haberle tirado un cabezazo que habría merecido la descalificación automática por parte del árbitro Joe Cortez.
El múltiple campeón mundial ganaba sin inconvenientes, y fue en el cuarto asalto cuando Ortiz encontró con un par de combinaciones a su rival, lo llevó contra las cuerdas, y en forma increíble le tiró un cabezazo infantil que mereció la descalificación automática, que cortó el labio del rival.
El árbitro los separó, y descontó un punto a Ortiz que, segundos después, se acercó a Mayweather para disculparse y abrazarlo. Pero apenas se separó de su contrincante, con la guardia baja, Ortiz recibió un zurdazo que lo sorprendió, y lejos de reaccionar atinó a buscar al árbitro con la mirada, recibiendo automáticamente un derechazo que impactó de lleno en su rostro, que lo mandó a la lona.
Fue nocaut válido, reglamentario, aunque no por ello polémico.
El público hizo saber a Mayweather que su actitud no fue de caballero, al igual que tampoco lo fue el cabezazo descalificador de Ortiz. Los abucheos para quien levantaba el cinto fueron enormes y Mayweather terminó de perder la cabeza cuando el presentador Larry Merchant le preguntó sobre el por qué optó por resolver el combate de esa manera. Poniéndose cara a cara, y elevando la voz, el campeón le gritó: “su empresa debería despedirlo”.
Mayweather mantiene su invicto de 42 peleas, de las cuales ganó 26 por nocaut.