Locales | 22 Sep Intensa actividad desarrolló ADAP (Atención de Alzheimer Paysandú) en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Enfermedad de Alzheimer, contando con una nutrida concurrencia de pacientes y sus familiares, desde que en esta entidad se trabaja en forma integral en todos los aspectos inherentes a la prevención y tratamiento.
Carmen Dematteis, Nancy Olivera, Marta Passarello y Susana Rodríguez, integrantes de la Junta Directiva de ADAP, junto al director técnico Dr. Gustavo Curbelo, estuvieron trabajando codo a codo en este día tanto en apoyo a pacientes y sus familiares como en los tests para detección precoz del Alzheimer, teniendo en cuenta que este es un aspecto fundamemental para retrasar las manifestaciones de la enfermedad y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
“Nuestras actividades se orientan a la atención del paciente con Alzheimer, a quien atendemos en la parte del aprendizaje para fomentar sus actividades con las maestras, como es el caso de la lectoescritura, con apoyo además de los estudiantes de educación física, con trabajos en juegos y otras acciones para mejorar la motricidad”, expresaron a EL TELEGRAFO.
“Asimismo contamos con la profesora de yoga, vienen los estudiantes de fisioterapia, en tanto la sicóloga trabaja con el grupo de apoyo a los familiares, haciendo una terapia grupal”, explicaron las integrantes de ADAP.
Precisaron paralelamente que actualmente se atiende a unas treinta personas en esta sede de Washington y Luis Batlle Berres, con Mal de Alzheimer ya diagnosticado, “pero es una población fluctuante ya que según la temporada vienen más o menos personas, de acuerdo al tiempo”.
Factores de riesgo
Esta enfermedad está catalogada como incurable, pese a los avances que se han desarrollado en los últimos años, por lo que las acciones se enmarcan fundamentalmente en mejorar la calidad de vida de los afectados y de sus familiares, en base a la actividad mental y física en las distintas posibilidades al alcance de los pacientes.
Un aspecto fundamental, que se hace a través de los tests, es la detección precoz de la enfermedad, así como el trabajo en la parte cognoscitiva de acuerdo a la situación de cada paciente, explicaron.
Recordaron que se entiende que promedialmente esta enfermedad se manifiesta a partir de los 65 años en las personas susceptibles, para lo que coinciden aspectos como la predisposición genética y factores de riesgo como obesidad, diabetes, tabaquismo, hipertensión, colesterol y alcoholismo, por lo que es preciso desde esa edad encarar acciones preventivas cuando hay indicios de una enfermedad incipiente.
La señales en las que hay que poner atención son la pérdida de memoria, cambio de conducta, falta de interés en la higiene personal, desorientación tanto en la calle como en el hogar, entre otras manifestaciones.