Rurales | 22 Sep Los estudios técnicos que realiza Uruguay están dando una buena inmunidad de las haciendas, por lo que más allá de las medidas de prevención ya adoptadas en las fronteras de Brasil y Argentina, el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca informó que no adelantará la vacunación contra la aftosa de los terneros, prevista para el mes de noviembre.
“El período de vacunación sigue como estaba previsto y en noviembre se vacunarán los terneros nacidos en el correr del año. La percepción a través de los muestreos serológicos para medir la inmunidad del rodeo bovino uruguayo, indica que hay una buena protección”, sostuvo el director general de los Servicios Ganaderos, doctor Francisco Muzio, indicando que el foco representa “una alerta, pero no es una emergencia”.
Manifestó que en el Aeropuerto Internacional de Carrasco y otros puntos de ingreso de turistas al país, “siempre existió la alfombra sanitaria, aunque pase desapercibida, y se mantienen los detectores de materia orgánica (escáners), más allá de que se eduque a los pasajeros sobre los productos que no se pueden introducir en el país, no solo por fiebre aftosa sino, además, por plagas fitosanitarias”. Es importante recordar que nuestro país exporta bovinos hacia Paraguay, pero no llegan animales guaraníes al país. El MGAP hacía de soporte técnico del Senacsa en residuos biológicos, buscando saldar esa carencia del organismo guaraní, pero el ingreso de esos materiales, que podían ser de riesgo, fue suspendido al conocerse el foco.
medidas
El Servicio Nacional de Calidad Agroalimentaria y Sanidad Animal (Senacsa) de Paraguay, envió a sus pares de la región un primer informe donde se establecen las medidas que se adoptarán para la aplicación del rifle sanitario, en tanto se brinda información sobre el área de emergencia --desde donde no se pueden mover animales-- y sobre las barreras de desinfección que se pusieron en marcha. Todavía se desconoce el origen del foco y si existen otras sospechas en territorio guaraní. El último foco de fiebre aftosa en territorio paraguayo fue en el distrito de Corpus Christi, departamento de Canindeyú, el 31 de octubre de 2002 y en el distrito de Pozo Hondo, departamento de Boquerón, el 12 de julio de 2003. La restitución del estatus sanitario como país libre de fiebre aftosa con régimen de vacunación, por parte de la Organización Mundial de Sanidad Animal (PIE), fue en 2005.
Rifle
El gobernador del departamento de San Pedro, José Ledesma, aseguró a la prensa guaraní que todos los animales del foco “serán sacrificados para evitar que se venda su carne”.
Según publicó el diario La Nación de Paraguay, Ledesma aclaró que “se busca evitar que algunos ganaderos pretendan comercializar la carne con fiebre aftosa entre la población local para alivianar sus pérdidas económicas. Tenemos que eliminar completamente estos animales como signo de que éste es un gobierno serio”, puntualizó. El gobernador admitió que los rumores del brote de aftosa en la zona ya circulaban desde hacía unos 20 días, hasta que el Senacsa confirmó la epidemia el pasado lunes en 13 vacunos de la hacienda afectada.
Auditoría
El presidente de la Asociación Rural de Paraguay, Juan Néstor Núñez, pidió que se realice una auditoría en Uruguay para comprobar si no tiene fiebre aftosa y se mostró molesto por las medidas de intensificación de la vigilancia sanitaria en la frontera uruguaya. El dirigente ruralista paraguayo afirmó en una entrevista con el programa Contacto Rural, de radio Rural, que si Uruguay hizo un simulacro y reforzó los puestos de control sanitarios fronterizos se puede sospechar que tiene la enfermedad. Uruguay reactivó en los últimos 10 días los controles sanitarios con el apoyo de efectivos militares en los puestos fronterizos. Ello generó la reacción del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) de Argentina, que emitió el lunes 19 un comunicado informando que profundizaba los controles de frontera por las medidas aplicadas por Uruguay.
Sospechas
José Ledesma, gobernador de San Pedro, departamento donde reapareció la fiebre aftosa en Paraguay, dijo que hacía 20 días que había sospechas de la presencia de la enfermedad y recién fue confirmada el domingo pasado por las autoridades del Senacsa. Núñez recordó que ante el rumor de fiebre aftosa en Paraguay y la duda que se había generado en la reunión del Comité Veterinario (CVP) realizada el viernes 16 en Montevideo, “ofrecimos la posibilidad de hacer una auditoría en Paraguay”. Pero “Uruguay toma la decisión de hacer un alerta sanitario en el cual efectúa un simulacro, cierra prácticamente su frontera con Argentina y Brasil y pone a sus Fuerzas Armadas en esta tarea. Eso no se hace así: hay un protocolo para llevar a cabo un simulacro”, acotó el dirigente. Esta situación descripta por Núñez ocurrió antes de la detección del foco de fiebre aftosa en su país. Como consecuencia, de la misma forma que “nos pusimos a disposición para que vinieran a Paraguay a hacer una auditoría, también queremos ir tanto a Uruguay como a Brasil para disipar la duda frente a los rumores de fiebre aftosa dentro del Mercosur”.
Vacunas
Carlos Simón, presidente interino del Senacsa, salió al paso de las especulaciones sobre una eventual falla de la vacuna antiaftosa. Luego de reunirse con el vicepresidente Franco, actual presidente en ejercicio, ratificó que los inyectables utilizados contaban con la certificación requerida. Hasta el momento, el Senacsa no tiene datos certeros sobre las causas del brote de aftosa en el país. El presidente de la ARP Regional San Pedro, Silfrido Baumgarten, asegura que cumplió con el calendario de vacunaciones en tiempo y forma. Una comitiva de técnicos se encuentra en el departamento de San Pedro para investigar el caso y bloquear la zona para evitar la expansión del virus.