Locales | 24 Sep Desde el 1º de octubre, la maderera Weyerhauser enviará al seguro de paro a unos 300 trabajadores, debido a los problemas de colocación de su producción en el exterior, que se arrastra desde hace un tiempo y que se ha agudizado en las últimas semanas, de acuerdo a lo manifestado por directivos de la firma.
La actividad se paralizará por un plazo mínimo de dos meses, debido a la falta de demanda por la Unión Europea como consecuencia de la incertidumbre que se ha generado en los países que integran este bloque.
Precisamente los países de la Unión Europea constituyen el 80 por ciento del mercado de la maderera instalada en Tacuarembó –que fabrica tableros y contrachapados-- y en los últimos tres meses la merma de ventas se ha acentuado sustancialmente, como consecuencia de la baja en la demanda y de los precios, lo que afecta la ecuación económica de la empresa.
Por esta razón los depósitos de la fábrica se encuentran atestados de mercadería que no puede ser colocada, sin perspectivas de reversión en el corto plazo, por lo que se ha decidido parar la planta a efectos de dejar transcurrir un lapso y evaluar el comportamiento de los mercados.
En este ínterin la maderera procurará colocar estos excedentes y realizar el mantenimiento de la planta, en un mercado internacional poco favorable debido a que el país que marca los precios de referencia, que es Estados Unidos, está sin demanda.
El director ejecutivo de la compañía para el Uruguay, Alvaro Molinari, sostuvo además que Uruguay padece problemas de competitividad y que “está sumamente caro frente a otros mercados” en razón del tipo de cambio, costos logísticos y salariales. Por otro lado, voceros de la Sociedad de Productores Forestales indicaron que la crisis económica que afecta principalmente a Europa hizo bajar la demanda de los productos forestales de nuestro país y que los compradores están renegociando precios de las operaciones ya acordadas, a la vez de dilatar nuevas compras.