Nacionales | 04 Oct El presidente José Mujica reconoció que existen problemas de gestión en la Administración de Servicios de Salud del Estado pero aseguró que en 2016 o 2017 todos los uruguayos tendrán una salud de primera calidad. Mientras tanto, se espera que hoy el gremio de funcionarios de la salud pública resuelva si pone fin a la huelga.
Mujica dijo que la salud es la utopía más maravillosa que tiene Uruguay, aunque la población no se dé cuenta y solo le da valor cuando está enferma. Añadió que se está en el camino adecuado y que aspira a que en el año 2016 o 2017 “Uruguay cuente con servicios de salud de primera y no unos para ricos y otros para el montón”.
Reconoció que existen problemas de gestión en ASSE pero señaló que hay que luchar contra ellos. “El problema fue que se gastó mucha plata que fue asignada para otra cosa, en aquel asunto de los anestesistas, y esa plata habría que haberla gastado en la contratación de 700 vacantes”, afirmó Mujica luego del acto conmemorativo del Día Nacional de Corea, en el World Trade Center de Montevideo.
Mujica no cree que los responsables sean los gerentes que fueron destituidos, sino la dirección colectiva a la que se le escaparon algunas cosas. Acotó que “no se va a realizar ninguna investigación administrativa” a ese nivel. Indicó que es necesario trabajar mucho y recordó que la oposición estaba presente en la dirección de ASSE. “La oposición estaba presente. ¿Y qué está mirando? ¿Para el costado?”, preguntó Mujica.
Por otra parte, la Federación de Funcionarios de Salud Pública considera que están dadas las condiciones para levantar el paro por tiempo indeterminado iniciado la semana pasada en reclamo por más puestos de trabajo en ASSE. El gremio realizó ayer consultas a sus trabajadores en los centros asistenciales y hoy se reunirán en asamblea para definir si finalizan la huelga.
“Hay una respuesta favorable, la gente acepta lo que se discutió el viernes”, dijo a El Observador el secretario del gremio, Pablo Cabrera. La federación realiza un paro desde el pasado miércoles en reclamo por el ingreso de 2.000 nuevos trabajadores al sector, los que estiman que son necesarios para que ASSE pueda brindar un servicio efectivo a sus usuarios. Los funcionarios llegaron a un preacuerdo el viernes con el Ministerio de Salud Pública, que se comprometió a proveer en el corto plazo 737 nuevos funcionarios, y en el futuro otros 400.