Opinion | 09 Oct Si bien los Juegos Florales fueron instaurados en la antigua Roma en el año 173 aC, en España cobraron especial trascendencia a fines del Siglo XIX y en Paysandú fueron de mucha importancia desde la segunda década del Siglo XX en adelante. Se trata de certámenes literarios promotores y difusores de una lengua, en los que se premian obras literarias en prosa y en verso.
A título de ejemplo, recordemos que los Juegos Florales de Paysandú en 1921 fueron organizados “Por iniciativa y bajo el patrocinio de la Sociedad Española de Socorros Mutuos de Paysandú”, según consta en el programa del acto de entrega de premios. El Jurado estuvo integrado por los doctores Horacio Maldonado, Carlos María Prando, Gustavo Gallinal, Juan Pedro Segundo y el señor Ismael Cortinas.
Los premios fueron adjudicados de la siguiente forma: Primer tema (Poesía de tema y versificación libres) – Flor Natural – A la poesía “La Hora Nueva”- Autor Sr. Luis Torres Ginar.
Segundo tema (Canto a América, a la Raza o al Descubrimiento) Primer premio a la poesía “Saludo a América” – Autor Manuel Benavente. Segundo premio: desierto. Tercer tema (Tríptico de sonetos a España, a América y a Colón): Primer premio al tríptico cuyo autor es el Sr. Diego Larriera Varela - Tríptico de sonetos a España, a América y a Colón.
Quinto tema (Poesía de estilo criollo): Primer premio a la composición “La historia de Colón según el gaucho Julián” – Autor Pbro. Raúl Porto.
Sexto tema (Un cuento) Primer premio al cuento titulado “Tiempo al Tiempo”- Autor Sr. Blás S. Genovese.
La Reina de los Juegos Florales de Paysandú de 1921 fue la señorita Sara Horta Fernández y la “Corte de Amor” estaba integrada por las señoritas Consuelo de Fuentes, Luisita Cabrera, Esther Beraldo, Diva San Miguel, Herminia Schweiser, María Elvira Mendívil, Estela Henderson, Luisa Esther Hiriart, Isabel López Arreseigor, Antonia Esteves y Elvirita Larrauri.
Es de hacer notar que en el programa del acto donde se efectuaría la lectura de los trabajos premiados y se entregaban los premios respectivos se leía la siguiente: “Nota: Se ruega al público no levantarse de sus asientos al finalizar el acto, hasta después de la salida de la Reina y su Corte”.
Mientras tanto, con su obra “Negativa”, Juan Escayola ganó el Primer Premio en el “Concurso Poético de la Semana Criolla” en Paysandú, el 23 de marzo 1928. Decía entonces: “Yo no pienso dentrar en esa fiesta/ De la “Semana Criolla”, ande los gauchos,/ Alardiarán baquías y destrezas/ Si consiguen montar potros serranos”. “Yo alardeo en el potro del instinto,/ Qu’es de la casta hereje en la bravura,/ Y m’he cruzao la vida en torbellino/ Sin conseguirle dominar la furia”. “Yo no pienso medirme con camperos/ De armada chica, con escasos royos … / Que confunden el lazo y el sobeo…/ Que si van a enlazar, lo hacen a tronco”.
A la vez, para ir a una referencia más cercana, debemos establecer que en el Certamen Nacional celebrado con motivo de los 400 años del “Quijote”, organizado por la Sociedad Española de Salto, de los tres primeros lugares, dos fueron ocupados por autores sanduceros.
Lo que planteamos es muy sencillo: prácticamente ha desaparecido una valiosa costumbre cultural que podemos llamar Juegos Florales, Certamen Literario o, simplemente, veladas poéticas. No decimos que no se realicen más pero es evidente que bajo organización oficial casi no existen.
Y esto es importante, muy importante, porque contando Paysandú con escritores de todas las edades y muchos especializados en diferentes técnicas y temas, es, puede decirse, imprescindible que se lleven a cabo certámenes literarios de todo tipo. Para niños, para jóvenes, para adultos, en todos los casos resulta imprescindible que los méritos sean adjudicados por un jurado absolutamente independiente que valore una obra y no un nombre y, a su vez, debe existir el respaldo oficial adecuado para que dichas obras sean premiadas con su publicación. Por supuesto que métodos y categorías deben ser actualizados y debe convocarse no sólo a la presentación de obras como poemas, ensayos o novelas, sino también a contenidos de sitios web, guiones para cine radio o televisión y, sin dudas, las artes plásticas. ¿Una bienal quizás? Las autoridades municipales sanduceras, con el apoyo del Ministerio de Cultura, ramas de la enseñanza y por supuesto, las universidades, deberían establecer actividades concretas y permanentes en este sentido.