Locales | 11 Oct Respecto a la decisión de incorporar los olivares en el lugar, explicaron los empresarios sanduceros que previamente se hicieron los estudios correspondientes, pues “nos contactamos con los empresarios de Tecnoliva y se hicieron los análisis correspondientes, los enviamos a España y resultaron podríamos decir más que aptos. Se necesita buen drenaje, más que nada, con suelo permeable, como es el caso de los emprendimientos forestales, con determinado porcentaje de arena”.
Con relación a los mercados, precisaron que “estamos ante un mercado prácticamente virgen, porque Uruguay importa prácticamente todo el aceite de oliva que consume, pero a la vez estamos pensando en la exportación. En este momento hay muy pocas marcas uruguayas, todas de muy buena calidad, pero evidentemente la mayoría de lo que se consume es de origen importado, y lo que necesitamos es exportar, evidentemente, porque hay mercados como Brasil, con una creciente demanda de aceite de oliva”.
Subrayaron a la vez que el aceite de oliva es comprobadamente beneficioso para la salud, ampliamente recomendado en el área de la salud cardiovascular por su alto contenido de Omega 3 --como el pescado--, y consecuentemente promueve un mayor porcentaje de colesterol bueno en el organismo.
“La idea es que cuando se instale la almazara también podamos encarar una campaña de difusión sobre los beneficios del consumo de aceite de oliva, que vayan las escuelas a visitar la planta, por ejemplo, que la gente se interiorice de lo que es el aceite de oliva, porque tiene muchas propiedades”, puntualizaron.
A efectos de la concreción del emprendimiento, “nos contactamos con muchas empresas del rubro a través de Internet, y nos inclinamos por el asesoramiento y apoyo de Tecnoliva, que es uruguaya, con soporte técnico español, de familia de olivareños de toda la vida, y están exportando hacia Marruecos, Israel, entre otros lugares. Es así que a través de este asesoramiento estamos bien posicionados para esta explotación”, evaluaron los empresarios.
Asimismo sostuvieron que en cuanto a la selección de variedades para los plantines, “en los olivos tienen ya una experiencia en nuestro medio de unos ocho a diez años, sobre todo en el sur, a partir de 2002. Hay variedades que se han adaptado muy bien, como es el caso de la Arbequina, que corresponde al cincuenta por ciento de las plantaciones de todo el Uruguay, entre otras, que se adaptan bien a nuestro clima y suelo, y son plantas que vienen de España con trazabilidad”.
“Debemos tener presente que hay almazaras ya funcionando en Minas, en Canelones, incluso en Salto, para procesar las aceitunas en cada zona”, explicaron.