Paysandú, Lunes 17 de Octubre de 2011

Brincadeiras Políticas

Nacionales | 10 Oct Rechazan prescripción
El 1º de noviembre está previsto que prescriban los delitos durante la dictadura militar en el marco de la Ley de Caducidad. Una de las opciones manejadas por el Frente Amplio era la reforma del Código Penal para ampliar los plazos de prescripción. Sin embargo, debido a la falta de acuerdo interno, ahora se trabaja para declarar los delitos de lesa humanidad lo que, en los hechos, significa decir que son imprescriptibles. La oposición, obviamente, está en contra.
Informa Últimas Noticias que, pese a que el vicepresidente Danilo Astori se pronunció en contra de un proyecto de ley para ampliar los plazos de prescripción, el Frente Amplio continuará hasta mañana en la negociación de un texto para presentar ante el Parlamento. Todos los sectores comparten que los delitos no prescriben, pero algunos dudan si se puede declararlos de lesa humanidad porque esa tipificación se integró a la normativa uruguaya en 2006.
La oposición, por su parte, ya adelantó que rechaza el planteo. El secretario general del Partido Colorado, Ope Pasquet, dijo al matutino capitalino que no acompañará el proyecto. “Crear leyes que hacen más gravosa la pena del reo contradice la Constitución y pactos internacionales de derechos humanos suscritos por Uruguay, como el de San José de Costa Rica”, explicó. No lo votarán “lo presenten como lo presenten”. El presidente del Partido Independiente, Pablo Mieres, consideró “muy raro que exista algún tipo de proyecto de ley que no se lleve por delante principios constitucionales”.
El Partido Nacional esperará a recibir la propuesta para tomar una decisión. Pero el diputado nacionalista Pablo Abdala ya adelantó su posición en su cuenta de Twitter: “El Frente quiere una declaración sobre la prescripción. O sea, quiere presionar a los jueces y violar la separación de poderes. ¿Otra vez?”.
“Afán de revancha”
Por su parte, el líder de Unidad Nacional, Luis Alberto Lacalle, dijo a La República que “hay un afán que no es bueno para el país de no dejar que las cosas se vayan quedando en el pasado. Esto de querer modificar legislación me parece que es un afán que tiene más aspecto de revancha que de justicia. ¿Todas las prescripciones de los delitos se van a ampliar?, ¿se va a ampliar la prescripción de los delitos presuntamente cometidos por gente en la Intendencia de Montevideo y que prescriben en el mes de marzo también o es simplemente para este tipo de supuestos delitos?”
Para Lacalle, es momento de perdonar y dejar atrás algunos hechos. “Tengo un tío bisabuelo, Luis Pedro Herrera que tenía 26 años y el 31 de diciembre de 1857 se enfrentó a la gente de César Díaz, el iba con su ayudante, se rindieron, y después de rendidos fueron degollados, y castrados. ¿Qué hubiéramos hecho en una familia y en un partido que tiene de esos y otros muchos, si hubiéramos seguido atizando eso respecto al Partido Colorado y viceversa? Las lecciones que da la historia del Uruguay que fue un país muy violento en el siglo XIX y lamentablemente a partir de 1963 hasta 1984, son que, yo no digo que nadie olvide como no olvido yo, pero perdonar y dejar que eso se incorpore al pasado es mejor para el país”, argumentó.
“Mirarse al espejo”
Y pasando a otros temas, Lacalle descartó en un 99% la posibilidad de dar marcha atrás en su decisión de no ser precandidato y dijo que en Unidad Nacional pretende “ser el maestro Tabárez”. Además, invitó al presidente José Mujica “a mirarse al espejo” sobre su planteo de “respeto y escuchar con buena fe”.
Mujica “no ha tenido respeto por la oposición en el caso de ASSE. El Presidente se enoja con demasiada facilidad. Es el primero que tendría que cambiar el tono y el contenido de sus expresiones públicas, y sigue cometiendo el error de hablar dos veces por radio, y en cuanta oportunidad se le presenta, lo que tiene el derecho a hacer, pero ha demostrado que ese funcionamiento no es el más correcto para gobernar. Y unidad nacional, él no puede confundir unidad con unanimidad. La democracia no funciona en unanimidades, funciona sobre la base de mayorías”, agregó.
¿Cambio de ministerio?
Los socialistas no están conformes con la gestión del Ministerio del Interior pero no proponen cambio de ministro sino de ministerio. En el documento de actualización de su tesis ideológica, proponen que pase a ser un Ministerio de Seguridad. Según El País, en el borrador se cuestiona la política de seguridad aplicada por el ministro Eduardo Bonomi, y se plantea la transformación del ministerio. Según explica, Interior “es un megaministerio que prácticamente se encarga de todo: desde la salud y la seguridad social a las cárceles, desde los bomberos a la identificación civil y la migración”. Por eso, “es imprescindible la reingeniería del ministerio que logre el pasaje de un Ministerio del Interior que responde a una vieja concepción panóptica y policial a un Ministerio de la Seguridad más especializado y restringido a las políticas de seguridad”, añade.


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