Opinion | 10 Oct Después de 50 años de prohibición, finalmente los cubanos tienen libertad parcial para comprar y vender sus vehículos nuevos. Los cubanos solo podían comprar y vender los modelos de antes del triunfo de la revolución de 1959. Los viejos automóviles han sido desde hace años una marca distintiva de Cuba.
Según la edición digital de la Gaceta Oficial, el decreto establece regulaciones para la “transmisión de la propiedad de vehículos de motor”, un tipo de transacción que estaba prohibida en la isla. Desde el 1º de octubre, el gobierno permite comprar autos nuevos a extranjeros que viven en Cuba de forma permanente y a los cubanos que obtengan ingresos en divisas o pesos convertibles por “su trabajo en funciones asignadas por el Estado o en interés de éste”, para lo cual deben tener permiso del Ministerio de Transporte, que podrá ser otorgado una vez cada cinco años. La normativa posibilita comprar autos nuevos en concesionarias de la isla y se elimina la restricción de que los cubanos autorizados para esa adquisición tengan que donar al Estado o “dar de baja” su vehículo anterior, en caso de que lo tuvieran, con lo que podrán venderlo o quedárselo. Además, los cubanos que decidan emigrar --casi 40.000 al año-- podrán vender sus autos antes de marcharse del país o transferirlos a familiares.
En tanto que los profesionales que pudieron comprar autos soviéticos otorgados por su trabajo antes de 1990, podrán venderlos a cualquier cubano o extranjero residente, que podrá tener más de un vehículo. También estarán incluidos autos modernos que durante los últimos años han podido importar o comprar de segunda mano algunos artistas y deportistas, así como médicos que han cumplido “misiones” oficiales en otros países.
La medida es una de las reformas más esperadas del gobierno de Raúl Castro. El programa también establece libertades de compra-venta, donación, permuta, legar y herencia de viviendas, aunque esta medida no está aún en marcha. Muy lentamente, los cubanos están adquiriendo algunas libertades perdidas durante el gobierno de Fidel Castro. Los cubanos han recuperado una libertad parcial. No se trata de un tema por demás importante, pero algo es algo.