INVESTIGAN SERIE DE FAENAS

Policiales | 29 Oct Un hombre de 33 años fue procesado por abigeato, en tanto la Policía continúa investigando otros delitos perpetrados en predios ubicados en el cinturón de la ciudad, en jurisdicción de las seccionales Tercera, Cuarta y Quinta. La Brigada Especial para la Prevención y Represión del Abigeato (Bepra), encargada del operativo, investiga una decena de denuncias.
VARIOS HECHOS
Según información extraoficial recabada por EL TELEGRAFO, el 3 de agosto el propietario de un establecimiento rural denunció en la Seccional cuarta, con asiento en Pueblo Porvenir, que uno de sus empleados halló –próximo a la costa norte del arroyo Negro-- un vacuno de la raza Hereford faenado, al que le faltaban los cuartos, lomo y paletas. El animal fue valuado en 700 dólares.
Dos días después, en la Seccional Tercera, un hombre de 56 años dio cuenta que desde el predio que arrienda sobre Ruta 3 le habían robado una vaquillona Normando, valuada en 400 dólares. Al concurrir la Policía, encontraron la cabeza, patas y vísceras del animal a unos 50 metros de la ruta.
El 6 de agosto el dueño de un establecimiento de Camino 127 y costas del arroyo Negro denunció que le habían faenado un vacuno. Uno de los peones narró que durante una recorrida por el campo, entre espinillos, encontró una vaca Red Angus (preñada) faenada. El animal había sido ultimado mediante disparo de arma de fuego y el autor del delito se había llevado la pulpa de cuartos, paletas y lomo. El vacuno fue valuado en 700 dólares.
En tanto, el 27 de agosto personal de la Seccional Quinta tomó la denuncia del dueño de un establecimiento de Colonia Acquistapace sobre costas del arroyo San Francisco Chico, quien dijo haber encontrado una vaca Holando faenada, la cual valuó en 500 dólares.
Posteriormente, el 31 de agosto, otro habitante de Colonia Acquistapace indicó a la Policía que su peón había encontrado dos terneros Holando faenados sobre las costas del arroyo San Francisco Chico, valuando los mismos en 900 dólares.
El 6 de setiembre un hombre de 44 años denunció en la Seccional Cuarta que en su establecimiento ubicado por Ruta 24, faltaban dos vacas Hereford de seis años, las que luego halló faenadas en costas del arroyo Rabón. Al arribar, la Policía recabó como prueba un envoltorio de cartón tipo vaina de cuchillo.
El 21 de setiembre, el propietario de un tambo ubicado en jurisdicción de la Seccional Cuarta denunció que en una plantación de avena había encontrado una vaca Holando a la cual le faltaban los cuartos, paletas, lomo y un vacío.
A los dos días, el responsable de un establecimiento ubicado en la zona del camino El Eucalipto Quemado, denunció que había hallado una vaquillona y una vaca faenadas. Los animales habían sido decapitados y ambas cabezas presentaban dos orificios de bala. Además les faltaba carne de las paletas, lomo, cuarto y mondongo. En tanto, uno de los efectivos extrajo de la cabeza de los animales dos proyectiles deformados, posiblemente de calibre .22.
El 2 de octubre un hombre de 42 años, domiciliado en Constancia, denunció la faena de una vaquillona de su propiedad. Personal de la subcomisaría de la zona y del Bepra concurrieron a un campo ubicado al Suroeste del Barrio Mevir, donde constataron que al animal le faltaba la pulpa de los cuartos, de las paletas y del lomo. Su dueño valuó el daño en 600 dólares. Policía Técnica certificó que el vacuno presentaba un disparo de arma de fuego en la cabeza.
Finalmente, el 24 de octubre personal de la Seccional Cuarta tomó la denuncia del responsable de una estancia situada por Ruta 90, quien indicó que le faenaron un novillo raza Hereford al que le faltaban las pulpas de los cuartos, paletas y lomo; además de la lengua.
ALLANAMIENTOS Y CAPTURA
Mediante averiguaciones practicadas por la Policía y de acuerdo al modus operandi empleado en todos los casos, se estableció que no sería ajeno a los hechos Héctor Ricardo Racero Irigoyen, alias “el Gato”, quien junto a otros dos hombres estaría vendiendo carne en el barrio Curupí.
Un allanamiento llevado a cabo en la finca del sospechoso permitió –en presencia de su concubina— ocupar preventivamente un rifle JW desarmado, un machete de unos 38 centímetros de hoja, un cuchillo Tramontina de 15 centímetro de hoja, un cuchillo cabo de guampa, dos chairas, aproximadamente 10 kilos de pulpa, una lengua vacuna, tres mochilas, un bolso, una balanza con plato, bolsas de nylon, un cargador de rifle con cuatro cartuchos vivos y media tarrina de plástico. La concubina de Racero dijo desconocer la procedencia de la carne pero suponía que la podría haber llevado su pareja, cuyo paradero desconocía.
Una inspección realizada por una veterinaria a la carne ocupada en la finca de Racero determinó que poseía restos de tierra, pasto y coágulos de sangre, debiéndose esto a que no fueron faenados en un frigorífico o matadero habilitado, por lo que no es apta para el consumo humano. Ante ello, la jueza subrogante de Segundo Turno, Karen Torres, dispuso que la carne fuera entregada en donación al zoológico municipal.
Tras varios intentos para aprehender al principal sospechoso, se implantó un operativo en que participaron efectivos del Bepra y de Radio Patrulla que permitió detener en su domicilio a Héctor Ricardo Racero Irigoyen, poseedor de diez antecedentes penales (seis por abigeato, uno por faena clandestina, dos por hurto --uno de ellos especialmente agravado-- y uno por lesiones personales)
Indagado, dijo que la noche anterior al allanamiento en su finca se había desplazado en un ómnibus hasta el kilómetro 16 de Ruta 90. Fue hasta un campo que da al Norte de la ruta y utilizando un rifle mató un vacuno que luego faenó. Luego de sacarle unos trozos de pulpa se retiró a la ruta a esperar el ómnibus para retornar a su finca. Respecto a los demás hechos, negó su vinculación.
La Justicia dispuso el procesamiento con prisión de Héctor Ricardo Racero Irigoyen por dos delitos de abigeato en reiteración real, en tanto prosiguen las averiguaciones.