Policiales | 13 Nov Próximo al mediodía de la víspera, personal policial de las seccionales Primera y Cuarta recupera el cadáver de Umberto Arel Fracchia Firpo, de 75 años, quien estaba desaparecido desde el pasado jueves 3, cuando fue visto por última vez en 18 de Julio y Montevideo. El mismo se encontraba parcialmente sumergido en un tajamar perteneciente a una chacra de la zona Sur de San Félix. En tanto, efectuada la autopsia por la forense Rosa López, no se pudo saber la causa del deceso ya que los órganos se encontraban “en avanzado estado de putrefacción”. Asimismo, se indicó que “por apariencia” el cuerpo tendría más de cuatro días en el agua.
Según pudo saber EL TELEGRAFO, un joven de 25 años fue el autor del hallazgo. Al parecer, el muchacho se dirigió a pescar al tajamar --llevando consigo una chalana-- y al acercarse al agua vio un cuerpo flotando boca abajo. De inmediato dio aviso a un policía que vive en la zona, el cual se comunicó con sus superiores de la Seccional Primera, en cuya dependencia había sido radicada la denuncia de desaparición. Éstos por su parte –debido a la jurisdicción-- notificaron del hallazgo a sus pares de la Seccional Cuarta.
Una vez en el lugar, los efectivos actuantes informaron al Comando policial, al juez de Cuarto Turno, Pablo Dalera, y al forense, así como acudieron efectivos del Departamento de Policía Técnica. Si bien aún no había sido reconocido por familiares, la indumentaria del occiso concordaba con la descripción de Fracchia Firpo al momento de radicarse la denuncia: vaquero, camisa roja y verde a cuadros, y buzo de lana verde.
El lugar del hallazgo del cadáver está a unos metros de la finalización de avenida al Hipódromo y Calle Nº 88 Sur Igualdad. El tajamar de la chacra privada --en cuyo predio se está realizando una plantación de arroz-- está a unos doscientos metros de la portera. En base a pistas que manejaría la Policía, no se descarta que el anciano, que padecía de atrofia cerebral, haya ingresado al predio en la noche y tras recorrer varios metros cayera al agua, no consiguiendo salir a flote.
UN VECINO CONOCIDO
La desaparición y posterior hallazgo de Fracchia Firpo significó la pérdida de un sanducero conocido por mucha gente. Jubilado de Ancap desde hacía más de diez años, últimamente se encargaba de acompañar a su esposa –con quien vivía en barrio Pay Cap-- en la venta de ropa tejida para bebés en un puesto callejero próximo al Banco República, por 18 de Julio.
Este caso significó la puesta en marcha de un fuerte operativo policial para determinar su paradero. La primera búsqueda se concentró en la zona del arroyo Sacra por las avenidas Naciones Unidas, Park Way, Alemania y Francia, desde la Ruta 3 hasta las márgenes del río Uruguay. A pie y en vehículos, los efectivos de Radio Patrulla y del Servicio Especial de Patrullaje Urbano (SEPU) se concentraron en la búsqueda por agua, vegetación y fincas, ocasión en que exhibieron la fotografía del desaparecido. Al no obtener resultados positivos, la Policía implementó una segundo rastrillaje el pasado miércoles en la zona de la Curtiembre, que tampoco arrojó pistas firmes.
En tanto, se habían entregado fotografías a distintas empresas de ómnibus de la Terminal y una señora mayor había indicado a los familiares de Fracchia Firpo que lo había visto haciendo cola para cobrar en un local de pagos. Esto motivó que la Policía revisara la cinta de seguridad del lugar, pero la persona señalada por la anciana no era la que buscaban.
Finalmente, el hallazgo del joven pescador permitió terminar con la incertidumbre pero enlutó a la familia Fracchia y sus amistades.