Nacionales | 07 Nov Jueces amenazados
El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, resaltó el papel de la Justicia en el procesamiento de la jueza ahora suspendida en sus funciones, Anabella Damasco. “Ningún organismo está libre de tener este tipo de problemas. Lo que importa es que el organismo se controle a sí mismo y que corrija lo que está mal”, dijo el ministro. Bonomi fue consultado sobre la posibilidad que Damasco haya sido amenazada, tal como habría declarado frente al juez Jorge Díaz. Respondió que “tengo constancia de que hay más de un juez amenazado. Quiénes, no voy a decir, pero hay más de uno”. Por otra parte, el presidente de la Suprema de Corte de Justicia (SCJ), Leslie Van Rompaey, aseguró que “la Justicia uruguaya mantiene una tradición de honestidad histórica que no puede ser manchada por un hecho aislado”. Van Rompaey destacó la actuación del juez Jorge Díaz. “Siento una profunda tristeza. Me resulta casi inexplicable y rescato la actuación del juez Díaz” expresó.
Para García Guariglia, no
Pero los dichos de Bonomi fueron desmentidos por el vicepresidente de la Asociación de Magistrados del Uruguay (AMU), Carlos García Guaraglia, quien dijo que no tiene “el conocimiento de que haya jueces amenazados”. Con respecto al fallo del juez Jorge Díaz, aseguró que “la actuación de la Justicia enaltece al Poder Judicial” y confió en la actuación de dicho magistrado. “La situación de Damasco le corresponde al juez encargado de la causa”, dijo y agregó: “la AMU no tiene ninguna injerencia”.
La AMU aceptó la renuncia de Damasco, quien se encontraba en su segundo período al frente del gremio de los magistrados. Desde la Asociación se aseguró que se debe seguir trabajando con los temas de la agenda como hasta ahora. “La institución está por delante de las personas” dijo García Guaraglia a la prensa.
Para Van Rompaey, los hay
La polémica no cesa, ya que el presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Leslie Van Rompaey, dijo que a él también le consta que hay jueces amenazados. “Son situaciones en las que debemos manejarnos con reserva, porque está en juego la integridad de las personas que pueden estar en esta situación. La situación a mí me consta pero no voy a hacer más declaraciones”, sentenció.
Van Rompaey también dijo que “estamos evaluando la redacción y aprobación de un protocolo de actuación a estas situaciones, porque no es que no sepamos los depósitos que existen, porque están a disposición nuestra por parte del BROU, pero estamos pensando evaluar el tema para mejorar la situación y prevenir una situación similar, que descartamos que ocurra”.
“El control fundamental es el cumplimiento del juez de sus obligaciones legales y administrativas. Hay que pensar muy bien qué controles tener, en eso estamos. Lo primero es evitar que en lo sucesivo el dinero pase por manos del juez, una de las ideas es que vaya directamente al depósito del banco, así como también en situación de drogas o de armas”, declaró Van Rompaey.
Sorpresa en el sector político
Legisladores del gobierno y de la oposición expresaron su sorpresa ante el hecho, pero destacaron que el episodio demostró que el sistema judicial funciona correctamente más allá de quién sea el indagado. “Me quedé totalmente sorprendida”, expresó la senadora del MPP, Lucía Topolansky. Por otro lado, destacó que el accionar del juez especializado Jorge Díaz, quien procesó a Damasco, “fue impecable”.
Consultada sobre si el episodio puede afectar la imagen del Poder Judicial, Topolansky estimó que el hecho causará un efecto positivo. “Esto habla muy bien del Poder Judicial uruguayo y su seriedad. En otras corporaciones a veces se tapan cosas”, afirmó. Por su parte, el senador de la Vertiente Artiguista, Enrique Rubio, dijo que el procesamiento de Damasco le causó “tristeza”, porque era una jueza “con mucho prestigio ganado”. De todos modos, el senador frenteamplista subrayó que el caso demuestra que “el sistema funciona”.
En tanto, desde el Partido Nacional, el senador Sergio Abreu (Alianza Nacional) señaló que ante casos de este tipo lo único que corresponde es expresar el “apoyo” a la Justicia. “Debemos atenernos a lo que la Justicia, la Suprema Corte y los jueces dictaminan”, dijo Abreu.
La sociedad de
consumo es culpable
Lucía Topolansky culpó de la gran cantidad de basura en Montevideo a “la sociedad de consumo”, la que, a su juicio, “no existía tan así” cuando en 1989 el Frente Amplio (FA) comenzó a gobernar la capital del país. “Estamos en una sociedad de consumo donde es cada vez mayor el use y tire, y los envoltorios vienen con dos o tres envoltorios que tiramos. Eso no existía tan así 22 años atrás, y 50 menos todavía. Entonces, esa multiplicación de la cantidad de kilos de basura per cápita diarios es culpable. A eso se suma que los montevideanos somos desprolijos, hay que decir la verdad de la milanesa”, remató Topolansky.