Nacionales | 12 Nov Gobierno, empresarios y trabajadores coincidieron en la necesidad de mantener abierta la puerta del diálogo en el sector industrial. El ministro de Industria, Roberto Kreimerman, señaló que el principal desafío es diversificar la matriz productiva. Mientras la Cámara de Industrias reclamó que las normas laborales deben adaptarse a la realidad de las pequeñas empresas, el Pit Cnt reivindicó la negociación colectiva como mecanismo para que los trabajadores participen del producto final de las empresas.
Gobierno, empresarios y trabajadores celebraron el Día de la Industria, al cumplirse hoy 113 años de la Cámara de Industrias del Uruguay. El ministro de Industria, Roberto Kreimerman, sostuvo que la producción industrial es un potente motor del proceso de crecimiento que atraviesa la economía. Precisó que si bien la industria es una fuente distribuidora de la riqueza, el desarrollo del país demanda una mayor industrialización en sentido amplio, no sólo “con chimeneas”.
Destacó que el principal desafío es la diversificación de la matriz productiva, fundamentalmente en lo que refiere a la conformación de la canasta exportadora. Precisó que el aprovechamiento eficiente de las tecnologías de la información y de la energía es fundamental para mejorar la productividad del sector. Abogó por aprovechar las ventajas naturales para desarrollar nuevos rubros. Destacó particularmente el rol de los consejos sectoriales para superar limitantes, ámbito que convoca a trabajadores, empresarios y gobierno.
Por su parte, el presidente de la cámara, Washington Burghi, resaltó los principales componentes que deberá tener la industria nacional del futuro. Destacó particularmente la cohesión social y la generación de nuevas oportunidades de trabajo. Añadió que la industria crea oportunidades para la formación de los trabajadores. Consideró que Uruguay debe estar integrado al mundo y promover un Mercosur donde lo convenido se cumpla. Además, pidió que las normas laborales “sean aplicables” por todas las empresas, incluidas las medianas y pequeñas que son las mayoritarias en el país.
El coordinador del Pit Cnt, Fernando Pereira, dijo que según los propios datos de la Cámara de Industrias en 1988 había 171.000 trabajadores en el sector, en 2002 habían 66.410 y en 2010 se registraron 220.000. “Por primera vez se comenzó a tener política industrial”, aseveró. Reivindicó la negociación colectiva como mecanismo para que los trabajadores participen del producto final de las empresas. Pidió “elevar la mira” y mantener el diálogo con los empresarios a pesar de las diferencias que por estas horas se sostienen por la ley de negociación colectiva. Afirmó que hay que cuidar la viabilidad de las empresas, porque cuando cierra una fábrica el que más se perjudica es el trabajador. Por otra parte, el gobierno prepara tres medidas para paliar la situación del sector maderero ante la caída de la demanda por la crisis internacional. El Poder Ejecutivo publicará un decreto para elevar la devolución de impuestos a la madera del 2% al 4%, se reducirá el plazo para esa devolución de 300 días a un mes y se incluirá al sector en el régimen especial de prefinanciación de exportaciones.