Centro Comercial pide más controles

Locales | 18 Nov El Centro Comercial e Industrial de Paysandú afirma que cada día los comercios sanduceros pierden ventas por un millón y medio de pesos debido al ingreso de mercaderías desde la vecina ciudad de Colón. Por este motivo, y en el marco de un contexto en el se pretende acordar un paquete de medidas de contingencia con la finalidad de descongestionar el cruce del puente internacional General Artigas en la próxima temporada estival, la gremial del comercio y la industria sanducera planteó su preocupación al Director Nacional de Paso de Frontera, Raúl Peluffo. La misma posición planteó en la víspera en una reunión en la que participaron representantes de los Ministerios de Defensa y Transporte y Obras Públicas, además de la Intendencia y del Paso de Frontera, en la que se avanzó hacia acuerdos referidos a un proyecto arquitectónico de mejora de la infraestructura del lugar, que es una de las principales vías de acceso del turismo argentino hacia Uruguay. El presidente de la institución, Gastón Zardo, dijo a EL TELEGRAFO que “si bien nosotros apoyamos que se busque la forma que los turistas puedan ingresar más rápido a Uruguay a través de Paysandú y en lo posible nuestra ciudad también tenga más visitantes, también decimos que es necesario reforzar los controles aduaneros para el tránsito vecinal”.
“Si en una situación en la que hay menos tránsito pero también colas, el comercio local pierde un millón y medio de pesos por día --según estimaciones que hemos realizado en base a datos de CARU y otros organismos--, creemos que un pasaje rápido para todos aumentará el ingreso de mercaderías argentinas a Paysandú”, agregó. Como alternativa, el Centro Comercial propone para la temporada de verano el uso de canales distintos para la circulación del tránsito vecinal y turístico y que en el caso del tránsito vecinal se realicen los controles “que hoy no se están realizando”. “Pedimos que haya control”, reafirmó, agregando que “en Paysandú hay más de 2.500 comercios que ocupan a unas 30.000 personas y estamos preocupados porque el ingreso de mercaderías argentinas está haciendo bastante daño”, dijo.