Paysandú, Domingo 11 de Diciembre de 2011
Nacionales | 08 Dic El país del “todo vale”
El director académico del Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social (Ceres), Ernesto Talvi, criticó hoy la actitud del presidente de la República, José Mujica, haciendo referencia a la campera del Ejército venezolano que vistió el primer mandatario en la cumbre de la Celac.
Según Talvi, dicha actitud resume el hecho de que dentro de la administración del gobierno nacional, los agentes “operan esencialmente a voluntad”, haciendo valer “sus intereses particulares muchas veces en desmedro de los intereses del país, sin ningún límite aparente” y aseguró que vivimos en un país “donde todo vale”, incluso que “el presidente se ponga una campera del ejército venezolano, que es vestirse como el presidente Chávez, sin medir las consecuencias del valor simbólico de una imagen”, lo que en su opinión “no representa el sentir de la enorme mayoría de los uruguayos”, aseguró el académico.
No jugar con fuego
“Haya sido para transmitir una señal o simplemente para abrigarse, por su investidura y por el poder de esa imagen, la duda queda instalada”. “La percepción de vacío de poder, las señales ambiguas, dejan una sensación de desconcierto y confusión. De improvisación. De falta de rumbo. La sensación de que el país es un barco a la deriva”, aseguró Talvi.
De acuerdo a lo expresado por el experto, Uruguay está ante una oportunidad excepcional en materia comercial y también ante la posibilidad de tener que enfrentar una crisis internacional. “En cualquiera de las dos hipótesis, ya sea para capitalizar la oportunidad extraordinaria que tenemos de ingresar de lleno en la senda del desarrollo, ya sea para enfrentar lo que podría ser al peor crisis internacional en 80 años”, dijo y agregó que “éste no es el momento para generar desconcierto, dudas o incertidumbres”, asegurando, además, que Uruguay debe “ofrecer certezas” y no “jugar con fuego”.
Lucha interna
La lucha por el rumbo económico también se instaló dentro del Ministerio de Economía y Finanzas, donde la relación del subsecretario, Luis Porto, con el ministro Fernando Lorenzo es tensa. Cuando el presidente José Mujica nombró a Luis Porto como subsecretario de Economía, en el astorismo festejaron. Creían que, en el marco de la disputa interna del gobierno por el rumbo de la política económica, Fernando Lorenzo ganaba un aliado y su línea ideológica se adueñaba del equipo que marca la cancha en esa materia.
Según ese análisis, el mujiquismo se iba a recluir en la Torre Ejecutiva donde además del mandatario tienen sus despachos la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), el secretario y prosecretario de la Presidencia y asesores como el ex subsecretario Pedro Buonomo. En ese esquema, la disputa se transformaba en una guerra fría entre el MEF y la OPP.
Pero pasaron casi cuatro meses y la realidad mostró que el escenario es totalmente distinto. Porto no era tan astorista como pensaban y en vez de un aliado de Lorenzo pasó a ser su pesadilla y, según publicó El Observador en base a fuentes de ambos sectores frenteamplistas, los jerarcas han tenido fuertes encontronazos.
El subsecretario tiene línea directa con Mujica y hablan de forma casi cotidiana. Ese fue otro ingrediente que tensó la relación entre el número uno y el dos del Ministerio, lo que se suma a la molestia astorista en relación al rol cada vez más protagónico del subsecretario.
Lorenzo y Porto también tienen una larga relación. No solo se conocen desde hace mucho tiempo sino que además construyeron confianza política. Según dijeron a El Observador fuentes cercanas al ministro de Economía, este cambio en la postura de Porto es visto como una “traición”.
Vázquez no quiere
Si bien todo parece indicar que hubo un ofrecimiento concreto para que Tabaré Vázquez aceptara ser el candidato del Frente Amplio, lo que eliminaría la discusión sobre el futuro presidente de la coalición, el ex mandatario no quiere asumir ese rol.
Según Últimas Noticias, Vázquez tampoco participará en la discusión para la elección de los candidatos, que enfrentará a los sectores que pretendan imponer al sucesor de Jorge Brovetto. Desde su entorno explicaron que es “muy poco probable” que se involucre en una campaña que creará tensión entre el Movimiento de Participación Popular (MPP) y el Frente Líber Seregni (FLS).
Las elecciones de presidente y vicepresidente del FA se llevarán adelante el 27 de mayo. Por primera vez se harán a padrón abierto y con adhesión simultánea, por lo que los candidatos de los sectores harán una campaña en todo el país para conquistar la mayor cantidad de votos posibles. El MPP fue el sector que más insistió en realizar elecciones mediante este procedimiento, y ya se manejan los nombres de Lucía Topolansky y Ernesto Agazzi como posibles candidatos. Por estos plazos, allegados a Vázquez consideran que no se reintegrará a la actividad política partidaria hasta junio.
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