Opinion | 19 Dic La noche de este sábado será sin duda especial. Más allá de las creencias religiosas, más allá de lo tan buenos o malos que han sido los meses precedentes en la vida personal, llega el momento en que se pide “pido” a la cotidianeidad para soñar con un mundo de paz, amor y feliz convivencia. En la noche del sábado se vivirá la Nochebuena y se recibirá la Navidad.
Tiempo de abrazos, besos, buenos deseos, brindis, anécdotas. La mayoría de nosotros contamos con una familia --más grande o más pequeña-- o un grupo de amigos con quienes estaremos reunidos, disfrutando del fresco de la noche, conversando animadamente, con la música a alto volumen, alumbrados por las llamas de la churrasquera en la que se asará despacio y sin apuro un buen pedazo de carne.
Mas la noche también esconderá soledades; personas que no tienen la posibilidad de pasar en familia porque no tienen con quién hacerlo. Para ellos también será Nochebuena y Navidad, pero no es lo mismo brindar frente al espejo ni cruzar los brazos sobre el pecho.
Aunque en medio de la alegría, las bombas de estruendo y los fuegos de artificio no haya mucho tiempo para pensarlo, por aquí y por allá habrá solas y solos que tendrán su pan dulce y su sidra, pero no la alegría de estar acompañados.
La situación se repite no solo en Uruguay sino en cualquier lugar del mundo donde se celebre la Navidad. Por eso es bueno resaltar la iniciativa del intendente de Tacuarembó, Wilson Ezquerra, quien convocó a todas las personas que iban a pasar la noche del próximo sábado en soledad, a disfrutarla juntos en una fiesta comunitaria que se realizará en el club Democrático.
La idea es simple, como muchas de las mejores ideas. Cada persona que quiera disfrutar de esa especial noche con otras personas, hacer nuevas amistades, compartir a pleno, sólo tiene que inscribirse y luego llevar algo para comer y beber y entre todos compartir. La Intendencia agrega un show musical, panes dulces y sidras para el brindis. Esta es de las ideas que merecen imitarse. Quizás ya no haya tiempo para este año, aunque nunca se sabe, a veces surgen emprendedores que en pocas horas organizan todo. Pero sin duda es una idea que al menos merece agendarse para el año que viene. La Intendencia tiene lugares apropiados, como centros de la tercera edad. No se trata de una lujosa cena, sino de una unión contra la soledad en Nochebuena. Hay ideas que se basan en el espíritu mismo de la Navidad. Esta es una de ellas. Ojalá pueda imitarse en tierra sanducera.