No hay bodegas sanduceras

Rurales | 29 Dic Uruguay exportará vino blanco, tinto y jugo de uva a granel, una modalidad no muy desarrollada en nuestro país. Dos de las principales bodegas sanduceras, Leonardo Falcone y Wasiluk, no participan de este negocio, uno porque ya tiene el mercado exterior en Canadá y la otra porque su producción se vende casi íntegramente en Paysandú.
Para el presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura (Inavi), José María Lez, se trata de una buena noticia para el sector, teniendo en cuenta la proximidad de la cosecha 2012. Además de promocionar la imagen del país a través de la comercialización de vino envasado, también se procura fortalecer la colocación en el exterior de vino a granel y asegurar clientes fijos para el próximo año.
El presidente Inavi, José María Lez, confirmó a la Secretaría de Comunicación que en enero se exportarán entre 4 a 6 millones de litros de vinos a granel a China y Rusia, e indicó que está concretada la comercialización de un millón y medio de litros de vino blanco; un millón de mosto sulfatado (jugo de uva) y dos millones de litros de vino tinto. Además, podría concretarse la venta de un millón de litros más.
Pensar en la cosecha
El entrevistado explicó que, en materia vitivinícola, “el objetivo principal es la generación de la marca país para lo cual Inavi trabaja para la exportación de vino envasado”.
Señaló que, según datos de la Organisation Internationale de la Vigne et du Vin (OIV, por sus siglas en francés) el 70% de lo generado por los países productores de vino se exporta a granel, lo que, en Uruguay, llevó a las autoridades a promover también esa posibilidad.
En este caso puntual, la propuesta de comercialización provino de uno de los brokers (empresas intermediarias) que compran vino en distintos países del mundo, que vieron una posibilidad de negocio en Uruguay.
Lez manifestó que “estamos muy cerca de la próxima cosecha 2012 por lo que necesitamos mover un poco de volumen. Estamos pensando generar y cumplir las expectativas para asegurarnos clientes fijos para el año próximo”.
Abogó para que “se piense en la cosecha desde el vamos, donde la materia prima tenga el valor adecuado y se vayan dando las condiciones para ir conquistando mercado externo y no porque tenemos sobre-stock”.
No hay sanduceros
Dos de las principales bodegas sanduceras, Falcone y Wasiluk, dijeron a EL TELEGRAFO que no participan de este negocio.
Carolina Falcone señaló que “no es el tipo de vino que nosotros producimos”, aunque reconoció que “está bien que se haga, ha mejorado también el precio”.
Dijo que su bodega exporta vinos embotellados a Quebecq, Canadá “desde hace mucho tiempo, es un mercado muy serio y seguro”. Las exportaciones a la región francesa del país del norte de América, se hacen directamente al Estado, que es quien maneja la venta de alcohol en el país en sistema de monopolio. Como dato curioso, mencionó que “en estas fechas los expendios de licores están cerrados en Quebecq, los administra el Estado y cierra desde mediados de diciembre a enero. Pero el consumidor está acostumbrado, y compra con anticipación para las fiestas”.
Los vinos que se venden al país norteño son el tannat Abuelo Domingo y el tannat Roble, que han tenido gran aceptación en ese mercado. Allí los consumidores “están muy bien informados, y compran conociendo el producto”, por lo que Canadá se ha convertido en un cliente de “buenos volúmenes, constantes y en la misma fecha, por lo que simplifica mucho la negociación”.
Por su parte el enólogo Nicolás Wasiluk dijo que “no participamos de la exportación, aunque lo hicimos una vez exportando a Rusia. Ahora recibimos la invitación para el negocio, pero no participamos”. Sobre la colocación de sus vinos, señaló que “básicamente es el mercado interno que es muy bueno, y particularmente se consume en Paysandú”.