Senador Jorge Larrañaga

Locales | 06 Ene En la reunión del próximo 24 de enero por un acuerdo en la enseñanza, “el gobierno tendrá la última oportunidad de acordar, aquí se parte el queso”, dijo a EL TELEGRAFO el senador Jorge Larrañaga, al evaluar los pasos que se están dando en procura de consenso interpartidario para llevar adelante las reformas en la educación.
Larrañaga dijo que “las soluciones están, las hemos ofrecido. El Partido Nacional ha sido generoso a la hora de ofrecer soluciones, pero es el gobierno el que está maniatado, está preso de los sindicalismos corporativos que pretenden conducir la educación al amparo de una mal pretendida autonomía de la enseñanza pública de nuestro país”.
“Hemos tenido ya dos reu niones con el presidente de la República y los representantes de los demás partidos y yo creo que la última va a ser el 24 de este mes, porque ahí el gobierno tendrá que resolver si impulsa cambios en la conducción de la educación pública o si, por el contrario, queda de rehén de los sectores más radicales de su fuerza política y de los corporativismos gremiales”, evaluó.
“Yo no puedo creer que un gobierno que quiere cambiar la educación, que invierte 2.000 millones de dólares como se va a invertir este año 2012, termine por no aceptar cambios en la conducción de la educación pública. Si no hay cambios en la forma en como se conduce la educación de nuestro país, que no cuenten con el Partido Nacional. Si no hay cambios importantes, no habrá acuerdo. Yo quiero acuerdos para cambiar, que no van a ser milagrosos de la noche a la mañana. Pero si no hay un acuerdo para cambiar, que el gobierno no cuente con el Partido Nacional y tendrá un adversario muy duro criticándolo”, señaló.
Conducción por el
sistema democrático
Explicó que “no es admisible que hoy, ante la coyuntura económica y con una calidad de maestros y cuerpo docente que nadie discute, no tengamos la conducción de quien tiene que conducir la educación, que es el sistema democrático que la gente eligió en las urnas y no un grupo de representantes gremiales que yo respeto, pero que representan a muchos menos que los que representa el sistema democrático de gobierno. Esto genera que no tengamos una mejor educación y sí los índices educativos vergonzosos que el país exhibe”.
“Quiere decir que el 24 se parte el queso y es hora de decir basta de asistir a una situación en la que, por un lado, vemos que el presidente quiere cambiar la conducción de la educación y el Frente Amplio no quiere. Y por otro lado, el presidente quiere impulsar una universidad tecnológica del Uruguay y el Frente Amplio le dice que no, que lo va a estudiar. El presidente dice que quiere aplicar planes en donde se defienda la autoridad de los directores de los liceos, que habla de una idea nacionalista de la autonomía de los centros educativos y resulta que sectores del Frente se alían con sectores sindicales para oponerse al plan ProMejora”, apuntó.
“¿Quien manda? O el gobierno o el sistema democrático mandan en la educación o de lo contrario que se siga en esta situación de caos, en donde vamos mal, y lo decimos por los 550.000 niños y adolescentes que dependen del sistema público de educación”, acotó. “El 24, por lo tanto, se va con un espíritu de acordar o el gobierno se queda abrazado a los sindicatos y la educación lamentablemente quedará frenada, donde ni siquiera los profesores han podido elegir cargos en algunas situaciones por presión de malos sindicalistas que llevan a mal puerto la conducción de su sector sindical”, subrayó.