Locales | 13 Ene Horas claves se viven en la investigación y en las actuaciones judiciales relacionadas con el caso del hurto de la pistola usada por el general Juan Antonio Lavalleja, dos sables y monedas y billetes antiguos, pues si bien hay dos procesados y las monedas aparecieron, se sigue buscando en todo el país, y de manera internacional a través de Interpol, la histórica pistola. Pero además, en las últimas horas han surgido novedades de tal importancia que los investigadores -de acuerdo a fuentes muy bien informadas- esperan que cambie radicalmente el enfoque global del caso.
En el caso de las actuaciones judiciales, en la jornada de instrucción, quedó en claro que los dos procesados por hurto especialmente agravado en calidad de autor, J.A.L.Q., de 37 años y J.E.R.C., de 22 años, dijeron mucho menos de lo que saben. EL TELEGRAFO pudo saber que el menor en todo momento negó su participación en el hecho, en tanto el mayor se atribuyó la responsabilidad, en la medida que se encontraron sus huellas dactilares en la escena del delito. Por otra parte, fueron imprecisos en los datos aportados sobre los objetos robados. Uno de ellos, por ejemplo, identificó los sables como “bayonetas largas” y el otro como sables. Eso motivó que un jerarca municipal expresara en la víspera que se habían robado dos bayonetas, pero las fuentes consultadas mantuvieron la versión que, tal como fuera informado por EL TELEGRAFO, se trata de dos sables, si bien no de gran importancia histórica, pues no pertenecieron a ninguna figura de primera línea del proceso revolucionario ni de la Defensa de Paysandú. Asimismo, también en la víspera quedó claro que los sables no pertenecen al comodato otorgado por el ex Museo Salesiano, sino al acervo genuino del Museo Histórico Municipal.
La Policía continúa las investigaciones tendientes a dar con el escondite de la pistola histórica y de los sables, pero más allá aún sigue los pasos para dar caza al autor intelectual, desde que quedó claro que se trató de un robo por encargo.
Los dos procesados son aves de alto vuelo, con profusos antecedentes. El mayor, conocido en el ambiente como “Zapallito” tiene 13 procesamientos previos al actual, el último de los cuales lo llevó a la cárcel en setiembre pasado aunque quedó rápidamente en libertad, apenas en diciembre. El hombre más joven, oriundo de Maldonado, tiene siete procesamientos previos, en Rocha, Lavalleja y Paysandú, donde fue procesado en las cuatro últimas oportunidades.
Por lo tanto, conocen la forma de declarar, lo que se denomina como “hábil declarante”. Esto ha dificultado llegar a los puntos cruciales de la investigación, cuyo objetivo principal es la recuperación de las reliquias robadas. Asimismo, las autoridades municipales se han llamado a silencio, aunque se descarta que siguen atentamente las investigaciones y que aportan los datos que están a su alcance. Pero las próximas horas serán relevantes y lo que en ellas ocurra podrá cambiar el punto de vista del caso, y sorprender vivamente por los posibles involucrados.