Enero se está haciendo sentir

Rurales | 12 Ene El término sequía está siendo cada vez más utilizado por los productores del departamento y la región, con pasturas naturales que se van secando a causa de las altas temperaturas y el viento en los campos y aguadas que van desapareciendo y generando gran preocupación ante la falta de lluvias y pronósticos que no son nada alentadores.
El último registro es de los días previos a Navidad, cuando en el departamento llovió unos 30 milímetros de promedio, pero varias jornadas con temperaturas por encima de los 35 grados y mucho viento, hacen que las pasturas se sequen y el andar de los animales en los campos va quebrando el pasto, que luego se vuela. De todas maneras, el ganado por el momento mantiene una buena condición corporal.
Donde el panorama es más complicado es en el norte del país; zonas como Artigas, Salto, Rivera y parte de Tacuarembó están sintiendo algo más el impacto de la situación. Tanto en estos departamentos como en Paysandú, la primavera fue normal y las tasas de crecimiento de las pasturas hasta noviembre también fueron normales, pero en diciembre comenzó a faltar un poco de agua.
Déficit hídrico
Investigadores en meteorología entienden que actualmente no hay sequía sino déficit hídrico. “Una sequía es un largo período de varios meses o años de ausencia de lluvias. Lo que existe por ahora es un déficit hídrico puntual en algunas zonas de Uruguay y Argentina”, manifestó a El Observador el director de Nimbus Weather Service, José Luis Pérez.
El experto remarcó que la media anual de lluvias en Uruguay es 1.450 milímetros, pero el año 2011 cerró con 300 milímetros menos.
La Dirección Nacional de Meteorología (DNM) sigue la misma línea que el director de Nimbus Weather Service. Según informó el funcionario de Relaciones Públicas, Marcelo González, el país presenta un déficit de precipitaciones que, para el campo y para las actividades agropecuarias, serán complejas.
Según la estadística que maneja la DNM, hay un 80% de posibilidades de que las lluvias sean “iguales o inferiores” a lo que es el promedio histórico. “La perspectiva no es alentadora”, indicó. No obstante, todavía no puede hablarse de sequía. “Todavía los valores que hay no lo ameritan”, señaló González, aunque reconoció que “sí hay falta de agua”.
cultivos
Los principales problemas para el sector agrícola se ubicarían de Soriano hacia el norte, focalizándose en Young y Paysandú, donde ya se ven cultivos en mal estado. El déficit hídrico se está haciendo sentir; ya hay maíces de primera (aquellos plantados temprano) que se perdieron y el único destino que tendrán será el picado para alimentación del ganado. A esto se suman las dificultades en todos los cultivos de segunda, porque la humedad en el suelo apenas dio para su germinación y en la superficie deben enfrentar temperaturas de 40°C.
“Si no llueve se complicaría, porque hay otra semana sin agua --según los pronósticos meteorológicos--, marcharán varios maíces y las sojas van a comenzar a sufrir y se va a perder mucha área resembrada. Las sojas de segunda se van a complicar muchísimo porque están recién naciendo”, dijo a El País Rafael Ferber, presidente de la Cámara Uruguaya de Servicios Agropecuarios (CUSA), institución que nuclea a buena parte de los contratistas agrícolas del país.
horticultura
Entre los rubros más afectados por la falta de lluvias está la horticultura, pero por el momento no existen expectativas de suba de precios por la excesiva oferta de productos. El presidente de la Confederación Granjera del Uruguay, Alberto Iglesias, destacó que la falta de agua compromete las cosechas de cultivos hortícolas de hoja, como acelga, espinaca, remolacha, lechuga, así como también los zapallos. Sin embargo, aclaró que esta situación no puede incidir en un alza de precios de los productos porque hay un exceso de producción.
En frutales, los duraznos y ciruelas que se están cosechando, al igual que la pera que comenzará a recolectarse en los próximos días, no se verán afectados, mientras que las plantaciones de manzana que se encuentran en proceso tampoco serán perjudicados porque casi en su totalidad se desarrollan con sistemas de riego.
lechería
En la lechería, la producción no se ha resentido y las remisiones a planta de Conaprole se ubican en 3.500.000 litros diarios, un 20% superior a enero de 2011, que fue un período crítico para el sector por la falta de agua, destacó el presidente de la Asociación Nacional de Productores de Leche, Eduardo Viera.
Explicó que el déficit hídrico se está empezando a sentir y por ello se están usando las reservas forrajeras que en volumen importante se hicieron el año pasado. Sin embargo, si no llueve se pueden ver afectados los crecimientos de los verdeos, mientras que la disponibilidad de agua también se puede complicar.
MGAP
El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca emitirá un comunicado entre hoy y mañana sobre un relevamiento que se está efectuando acerca del estado de situación climática en el agro.
En función de los datos aportados por el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) sobre el nivel hídrico de los suelos y de informantes calificados sobre el estado de pasturas y aguadas, se habrá de evaluar si es necesario implementar medidas.