Nacionales | 20 Ene Diego Cánepa aseguró que al cierre de la primera semana de puesta en marcha del cobro de patente única en todo el país, la situación es normal. Agregó que los empadronamientos funcionan correctamente y que en la mayoría de los departamentos los ciudadanos están conformes por la baja importante de la patente. También recordó el compromiso del gobierno central, que aportará el dinero necesario para equilibrar las cuentas de todas las intendencias durante los próximos cinco años.
Por otra parte aseguró que el proceso requiere un período de adaptación, por lo que consideró normales los problemas informáticos que se presentan en algunas de las intendencias y adelantó que los inconvenientes estarán resueltos antes de fin de mes. “Esta situación no invalida el enorme cambio que experimenta el país con una sustancial baja en el precio de una cantidad significativa de patentes y el pago contado que tuvo un gran éxito”, sostuvo.
También señaló que, a pesar de que muchos intendentes consideraban que la rebaja del 20% en el pago contado no sería un estímulo para los contribuyentes, actualmente las cifras indican que este sistema fue muy utilizado.
Por otra parte, precisó que aún se están terminando de cerrar acuerdos con redes locales de pago, ya que las redes nacionales no tienen convenio con todas las intendencias. En el caso de convenios previos de deuda de patentes anteriores que algunos ciudadanos no han pagado, informó que se estudia la unificación de criterios de cobro.
Además sostuvo que los intendentes apoyaron que no se produjera un aumento en algunos valores por encima del 100% y que muchas intendencias en el sistema anterior cobraban patentes de menor valor a los autos de 2010 y 2011, que a los de 2008 y 2009. Según anunció, este tipo de situaciones se ajustarán en el año 2012.
Para concluir, informó que hace pocos días el Congreso de Intendentes se reunió para ratificar el éxito del sistema. Recalcó que esto fue posible por el compromiso del gobierno central, que aportará el dinero necesario para equilibrar las cuentas de todas las intendencias durante los próximos cinco años.