Aunque fueron desparejas

Rurales | 25 Ene Las precipitaciones registradas en Paysandú este martes fueron consideradas por los productores como buenas en general, pero también desparejas en varias zonas del departamento. “Partir al departamento al medio en forma horizontal” sería la forma más sencilla de ilustrar lo acontecido, con registros que superan los 40 milímetros al norte y de 5 a 30 milímetros al sur de esa línea.
Una línea imaginaria que une la desembocadura del río Queguay con la localidad de Piedra Sola, demuestra la diferencia de lluvias, con productores del Norte del departamento que han logrado buenos registros en los últimos trece días, y otros que se ubican al Sureste y que ayer recibieron --después del pasado 23 de diciembre-- su primer “bautismo” de agua en el presente año.
Los datos aportados por Jefatura de Policía de Paysandú hasta las 7 del martes, establecen para esa zona Norte que en Chapicuy llovió 60 milímetros y en Quebracho 45. Pero otros productores consultados por EL TELEGRAFO manifestaron que en Arroyo Malo fueron 45 milímetros, en Guaviyú 45, en Soto 60, en el kilómetro 122 de Ruta 26 llovió 50 milímetros.
Respecto a lo sucedido en la zona Sur, Jefatura informó que en ciudad fueron 22, en Pueblo Porvenir 28, en San Manuel 30, en El Eucalipto 20, en Guichón 5 y en Piedras Coloradas 20 milímetros. Por su parte, productores consultados indicaron que en Arroyo Negro llovió 33 milímetros, en Guarapirú 25, en Merinos 19 y en la colonia José Batlle y Ordoñez 16.
En el total de lluvias desde el sábado hasta la víspera, en Guaviyú llovió 67 milímetros, en Chapicuy 65, en San Manuel 59, en Pueblo Porvenir 58, en Arroyo Negro 58, en Quebracho 55, en Arroyo Malo 53, en ciudad 46, en Piedras Coloradas 35, en Buricayupí 30, en Guarapirú 27, en El Eucalipto 26, en Colonia José Batlle y Ordoñez 24, en Merinos 19 y en Guichón 8 milímetros. Merinos fue una de las localidades del interior que ayer recibió las primeras precipitaciones del año. “Fue una lluvia suave que penetró”, dijo a EL TELEGRAFO Giancarlo Menegazzi. “No es el 5 de Oro pero sí una buena quiniela” y “por lo menos te da un poco más de tiempo a que caiga otra lluvia”, sostuvo. Muy diferente es lo que le sucede a Gustavo Boffano en el kilómetro 122 de Ruta 26: “Acá llovió 20 milímetros el miércoles 11 de enero, 15 el viernes 20, 18 el sábado 21 y 50 ayer. Vamos 102 milímetros en un mes que ha sido difícil para todos, pero por suerte en esta zona hemos tenido jornadas con agua que para las pasturas ha venido muy bien”. Agregó que “se aprecia la diferencia entre los campos que han recibido buena agua y otros de la Ruta 26 que todavía están amarillos”. En el caso de las cañadas, “las más duras se acomodaron y eso ya es bueno”.
En el país
El Litoral Norte de Uruguay fue la zona que recibió más lluvia hasta la hora 10 de este martes, momento en que la Dirección Nacional de Meteorología procesa los datos parciales de la mayoría de sus estaciones. La estación de Salto registró 58 milímetros. Bella Unión 26 y Paysandú marcó 22 milímetros. En el caso de Montevideo depende de la zona que se releve, pues la estación Prado registró 42 milímetros, mientras que Carrasco marcó 19,3. En el resto del país: San José 21, Melilla 20, Young y Colonia 19, Trinidad 8, Mercedes 7, Punta del Este y Laguna del Sauce 3, Durazno 2 y Paso de los Toros 1 milímetro.
perspectivas
Las perspectivas para que el déficit hídrico en los suelos se revierta en el corto plazo se disipa. Según el último informe de perspectivas climáticas para el trimestre enero-marzo que publicó el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), las probabilidades de que las lluvias estén por debajo del promedio histórico se extenderían hasta mayo. Esto surge del trabajo en tendencias climáticas que elaboran mensualmente la Dirección Nacional de Meteorología y la Universidad de la República. Según este informe, el déficit de precipitaciones ya presentó desvíos negativos en el trimestre octubre-diciembre sobre prácticamente todo el país.
Los departamentos más afectados fueron los del Centro y Noreste (Rivera, Tacuarembó y Durazno) donde se registraron déficit de lluvias de hasta un 40%. El resto del país tuvo desvíos negativos en torno al 20%. En tanto Artigas fue el único departamento donde las precipitaciones estuvieron por encima de lo normal. Además, en dicho trimestre, las temperaturas medias se incrementaron 0,2ºC en todo el país.
“La mayoría de los modelos predicen que el presente evento de La Niña débil a moderado, continuará durante la temporada de verano e incluso hasta el otoño antes que se disipe durante el período de marzo a mayo”, advierte el informe que divulgó el INIA. La probabilidad mayor (40%) es que las lluvias estén por debajo de lo normal durante el trimestre enero-marzo. Mientras hay un 30% de probabilidad para el tercil central (igual al promedio) y otro 30% por encima de la media. Respecto a la temperatura, hay un 50% de posibilidades de que la misma se comporte por encima de lo normal, 30% en el promedio y 20% por debajo.
Por otro lado, la ausencia de humedad en las capas del suelo se traduce en una menor disponibilidad de vegetación. Precisamente el INIA publicó el Monitoreo Mensual de la Vegetación --más conocido como el Índice Verde-- donde se evidenció un notorio deterioro entre diciembre y los primeros 20 días de enero.
Impacto
Hasta ahora, el mayor perjuicio por el déficit de lluvias lo sufre la agricultura. Las lluvias del fin de semana fueron desparejas pese al alivio que causaron en zonas donde se registraron precipitaciones por encima de los 10 milímetros. Aunque esto tampoco fue suficiente para que las represas de UTE aumenten su caudal de reserva. Por tanto, los costos de generación para el ente seguirán en niveles elevados. Pese a las consecuencias negativas que trae aparejado un déficit hídrico, se confirma que los modelos climáticos --que anticipan el comportamiento del clima-- son cada vez más confiables porque ya se había anticipado un fenómeno de La Niña para este verano. Según informó el diario argentino El Cronista, la consultora Econviews estimó que la sequía en Argentina podría provocar una merma de las exportaciones agrícolas de entre U$S 5.000 millones y U$S 6.000 millones.
el futuro
Lo que sí queda claro luego de las últimas lluvias, es que en zonas de Soriano, Río Negro y Paysandú deberá llover nuevamente para consolidar una recuperación y alentar la expectativa en una normalización del régimen hídrico a partir de febrero. Estas precipitaciones no evitarán que el déficit hídrico se haya “llevado” parte del potencial productivo, especialmente del maíz. El panorama para buena parte del maíz de primera es malo con áreas importantes donde se generalizó el picado de los cultivos. De todas formas, se sabe en cuanto a soja que no se va a resembrar --salvo excepciones-- y se quiere ver cuánto de lo implantado más tarde puede llegar a seguir adelante. Las sojas de segunda plantadas antes de mediados de diciembre han resistido mejor mientras los cultivos de primera han dejado por el camino parte del potencial. No hay negocios en la medida que los productores quieren ver el rendimiento que tendrán.
LECHERÍA
La Asociación Nacional de Productores de Leche evaluará en su primera sesión ordinaria de 2012 los problemas generados por la falta de lluvias, informó a Conexión Agropecuaria su presidente, Eduardo Viera. Se analizará el estado de situación, así como posibles paliativos al fenómeno. En los próximos días está previsto una reunión con el ministro Tabaré Aguerre para, precisamente, tratar el tema.
La remisión, que fue récord el año pasado --con 19,7% de crecimiento respecto a 2012--, venía bien en los primeros días de enero, mayor a la de igual período de 2011, pero luego las altas temperaturas, viento y falta de lluvias comenzaron a provocar una desaceleración.