Paysandú, Miércoles 01 de Febrero de 2012
Locales | 25 Ene El gobierno incapaz de contener el imperio del delito, se enoja y le hecha la culpa a la oposición y la prensa
Ante un record histórico de producción de asesinatos a razón de un crimen cada 15 horas promedio, el Ministro del Interior está de vacaciones en la playa haciendo lo mismo que los que quedaron trabajando: nada. Porque los culpables no aparecen.
No vamos a enumerar aquí la extensa gama de delitos que se cometen todos los días a toda hora y en todo lugar, porque todos la conocen y algunos lamentablemente por angustiosas experiencias.
Lo que sí resulta tragicómico es que se quiera tapar el cielo con un harnero y ponerse a discutir si el Sr. Bonomi es mejor o peor que los lamentablemente famosos ministros Días y Tourne. Es menos malo, pero ninguno mostró los atributos necesarios para desempeñar ese cargo. Los hechos hablan por sí solos. Pero eso responde a una norma impuesta por el Frente Amplio desde el 2005, que es darle las llaves de la Policía y las Fuerzas Armadas a los tupamaros o sea a los ex presidiarios. Por lógicas reminiscencias emotivas, después de haber estado con total justicia tantos años presos pagando sus delitos, siempre terminan mirando más por los delincuentes que por los ciudadanos que trabajan honestamente y como premio reciben del gobierno el castigo de vivir detrás de las rejas que debieron poner en sus propias casas.
Ante todo eso el Presidente salió a “pesetear” contra la oposición diciendo que criticaban pero no proponían nada y que se pasaban “poniendo palos en la rueda”.
La verdad que esas declaraciones, más que una crítica, parecen una confesión de lo que hacía todo el Frente Amplio cuando era oposición y él mismo, desde cuando tomó las armas para derrocar al gobierno blanco electo por el pueblo en la década de los años 60´, hasta el 2005 cuando dejó de ser legislador de oposición.
Es mentira que la oposición no aporta nada. Y vamos a probarlo mostrando el primer aporte que se hizo entre 2006 y 2007 para impedir el avance de la delincuencia. Aporte que la petulancia propia de incapaces puestos a gobernar durante la ‘administración Vázquez’, despreciaron olímpicamente.
En aquel entonces el Partido Nacional salió a recoger firmas usando el derecho de petición al amparo del Artículo 30 de la Constitución y las papeletas decían que se hacía en virtud de a) la creciente inseguridad pública que vivía el país, b) la falta de respuesta efectiva por parte del gobierno y c) la ausencia de legislación y la necesidad de actualizar la existente. En concreto se pedía la urgente aprobación de seis proyectos de ley que el Partido había presentado al Parlamento y que el Frente Amplio “cajoneó” usando su mayoría parlamentaria. O sea todo el Frente Amplio tiene las mismas culpas de despreciar las soluciones propuestas por el Partido Nacional que pedía:
Proyecto de Ley 945-2006. Artículos 69 y 72 del Código de la niñez y la adolescencia. Penalizar la Tentativa y no solo el delito consumado.
Proyecto de Ley 808-2006. Artículo 222 del Código de la niñez y la adolescencia. Antecedentes del menor. Se solicitaba mantener los antecedentes delictivos de los menores de 18 años. (No destruirlos).
Proyecto de Ley 1102-2006. Separación de los menores infractores del resto de los internados. Se proponía la creación de la Dirección Nacional de Rehabilitación de Infractores Adolecentes.
Proyecto de Ley 1104-2006. Omisión de deberes inherentes a la patria potestad. Se solicitaba la modificación de las penas ante el incumplimiento.
Proyecto de Ley 1129-2006. Facilitar el combate a la droga, especialmente en lo que refiere a la “pasta base”. Se pedían medidas tendientes a obtener información acerca de delitos y desbaratar bandas y bocas de venta.
Proyecto de Ley 944-2006. Seguridad en el medio rural. Se solicitaba actualizar normas ante la creciente inseguridad en las zonas rurales y el abigeato.
Esas solicitudes fueron presentadas al Parlamento por nuestros legisladores en nombre del Directorio presidido por Luis Alberto Lacalle, con el respaldo de ciento cuarenta mil firmas de ciudadanos que reclamaban eso como muy necesario.
Luego de lo expuesto podemos decir que el Sr. Presidente mintió al decir que la oposición nunca presentó nada.
El que no funciona es él y su partido político. Edil Ing. Ramón Appratto Lorenzo
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Abuso de autoridad
Es insólito que algunos funcionarios policiales procedan como lo hicieron dos, el 1º de enero de 2012, a la madrugada. Salía un joven de un local bailable y caminaba por una avenida en busca de un taxi, cuando se detiene junto a él un móvil policial con una policía femenina y uno masculino.
Le ordena: que los tiene que acompañar sin mediar explicación, lo esposan (retorciéndole las muñecas) y lo empujan dentro del móvil. Lo llevan al servicio de urgencia del Hospital y de ahí a las seccional 3ª donde queda detenido, incomunicado y a disposición del Sr. Juez
¿Motivo del procedimiento?
Yo soy su abuela y él vino a esperar el año con nosotros, vive en Canelones y trabaja en Montevideo.
Al correr de la mañana, al ver que no regresa, mi presión y mis nervios suben cada vez más.
Estando aún coherente, actúo: llamo al servicio de urgencias del hospital donde se me responde que estuvo allí, llevado por la policía y retirado por ello, pero no me quieren informar de qué seccional, es el “procedimiento”.
¿Buscar en guía los teléfonos de las comisarías? Ni se le ocurra, amigo lector, sólo figura el destacamento del barrio Paycap, el cual nunca contestó.
A todo esto, ya muy alterada, se me ocurre llamar al 911, donde si, me dieron los teléfonos de tres comisarías para “rastrear” en cual podía estar.
De ahí en más, comienzo a llamar hasta que en la 3ª se me dice que efectivamente está allí: detenido, incomunicado y a disposición del Sr. Juez.
No me podían informar más, sólo podía “arrimarle” comida.
Claro, ahora entiendo: no se puede explicar lo inexplicable.
Todo hacía suponer que iba para largo... pero ¡oh sorpresa! A los 10 minutos me llama una voz femenina muy amable diciéndome que me quede tranquila que ya lo están poniendo en libertad.
¿Cómo? ¿Y todos los delitos “perpetrados” por él, porque lo acusaron de romper los vidrios de un auto, de robar un auto, etc, etc; dónde quedaron esos delitos? ¿Es esta la forma de actuar de los guardianes del orden? ¿Cómo reparan ellos los daños en mi salud, los malos momentos hechos pasar a mi nieto?
Todas esas horas detenido porque sí o por negligencia de dos funcionarios y de sus superiores que no averiguan mucho, total, es uno más... ¿cómo se arregla?
¿En qué se ha convertido la seguridad de mi querido paisito? Donde un joven de 22 años no puede salir a bailar y regresar tranquilo a su casa, caminando.
Creo que ahí estuvo el problema, caminando es presa fácil para esta gente, tal vez en una 4 x 4 o en una buena moto, no lo “atrapan” tan fácilmente.
Pongo este lamentable episodio en evidencia, por la falta de ética de esos dos agentes del “orden”.
Sé que no puedo generalizar (perdón a los verdaderos policías) pero es la tercera vez que mi familia sufre abusos por parte de los guardianes del orden.
Quizás mientras ellos estaban tan ocupados con este “procedimiento”, en otra parte de la ciudad se estarían perpetrando verdaderos delitos que necesitaban de la presencia policial.
¡Basta de atropellos! Y lo digo con propiedad porque me ha tocado vivirlo y sentir la “impotencia” frente a la autoridad desmedida.
Pido como ciudadana que trata de estar al día con los impuestos (hasta los desmedidos), merecemos vivir en paz y por sobre todo con respeto.
El Ministerio del Interior, debería preparar a la gente que “se supone” debe velar por nuestra integridad física pero también enseñarles sicología.
¿Existirá esa materia “Psicología” en la carrera de estos funcionarios, cuando se los ‘capacita’?
Cuidemos entonces de que los ejemplos, los den los que verdaderamente los deben dar. No sea que se acuse a alguien de determinados “delitos” y al rato se vea a un agente del orden cometiendo el “mismo delito” tipificado a un ciudadano común (me consta).
Ya es hora de proceder con ética y verdadera equidad.
¡Somos tan pocos los ciudadanos a cuidar! Donde nos descuidemos, van a existir más policías que civiles.
Vivamos en paz, pensando que tenemos quien nos cuide ¡por favor! C.I .3.290.910-7
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Esta carta es para aclarar los dichos no ciertos de algunos medios de comunicación.
Matías Damián Rosano Fredo (nuestro hijo, hermano, tío y amigo) no corría picadas, ni estaba alcoholizado. Hubo gente conocida que vio todo lo ocurrido. El amaba las motos pero no corría.
El hecho ocurrido fue que le pasaron dos motos que sí corrían picadas, supuestamente se asustó y perdió el control de la moto. Volvió a casa y se perdió en el camino.
Nunca llegó.
Era y es amigo de los amigos, hermano de sus hermanos, hijo ejemplar y tío. Trabajaba desde las 7 hasta las 11, se bañaba, comía, iba a estudiar al ITP. Le faltaba un año par su diploma tan ansiado, para luego seguir superándose, para poder cuidarnos a nosotros, sus padres.
Amaba, fue muy amado, la gente y nosotros su familia fuimos testigos.
Desde la gente con la cual trabajaba con su padre, todos lo querían, hasta el que lo veía pasar con su termo y mate bajo el brazo. Así que los medios de comunicación, que dieron información errada, les pedimos que aclaren esta situación.
Exigimos respeto y disculpas. No se puede ensuciar a una persona que con 18 años trabajaba y estudiaba y en las 24 horas del día era hijo, hermano, tío y amigo de sus amigos quizás más hermano que amigo de sus amigos.
Su mamá, papá hermanos, sobrinos, abuelos y tíos.
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