Locales | 31 Ene Aunque la cantidad de trasplantes de órganos realizados en el país en 2011 aumentó aproximadamente un 30% en relación a 2010, también aumentó la cantidad de personas que requieren de ellos para seguir viviendo. Paysandú es el departamento del Interior que permitió realizar la mayor cantidad de trasplantes de órganos, seguido por Maldonado. En tanto aproximadamente el 23% de los uruguayos ha expresado, a través del formulario correspondiente, su voluntad de donación de órganos.
Así lo informó a EL TELEGRAFO el coordinador general del Instituto Nacional de Donación y Trasplante de Células, Tejidos y Órganos (INDT), doctor Raúl Mizraji, quien señaló además que Paysandú y Maldonado son los departamentos del Interior que permitieron la mayor cantidad de trasplantes durante el 2011. En este sentido, señaló que el año pasado hubo 163 potenciales donantes de órganos comunicados (esto es personas fallecidas que podrían ser donantes de cumplirse una serie de condiciones), de los cuales 37 fueron del Interior, lo que significa un 22,7%. “Paysandú tuvo cinco potenciales donantes en 2011, lo cual representa un 13,7% de todos los donantes del Interior, siendo junto con Maldonado los departamentos del Interior que permitieron la mayor cantidad de trasplantes”, afirmó Mizraji.
De los departamentos del norte del río Negro, Paysandú fue el departamento con mayor cantidad de donantes. “Recordamos que con una persona que fallece de muerte cerebral y decidió donar, son más de 20 las personas que pueden beneficiarse con diferentes trasplantes de órganos y tejidos”, dijo. El médico aclaró el alcance de la expresión “potencial donante comunicado” y dijo que cuando un potencial donante se encuentra en situación de muerte encefálica en una unidad de terapia intensiva, el INDT recibe la comunicación, pero para concretar el trasplante es necesario que se cumplan una serie de condiciones, como que esa persona no haya realizado por escrito una declaración expresa de no querer ser donante, que no tenga alguna enfermedad que contraindique la donación y que se pueda cumplir con los exiguos plazos que se deben manejar.
En este sentido, informó que en promedio el tiempo que transcurre entre la comunicación de la existencia de un potencial donante y que se termina la operativa de la donación es de ocho a diez horas. “A partir de la extracción del órgano, el trasplante se hace en tiempo variable, según el caso. Por ejemplo, para realizar un trasplante de corazón no pueden pasar más de tres horas entre la extracción del corazón del donante y su implantación en el receptor, lo cual limita bastante la logística”. Por estas razones “no todos los donantes de órganos comunicados terminan siendo, efectivamente, donantes”, explicó.
FUERON 162 TRASPLANTES
Durante el año pasado el Instituto Nacional de Donación y Trasplante de Células, Tejidos y Órganos realizó un total de 162 trasplantes, en su mayoría de riñón. En concreto, fueron ocho trasplantes de corazón, dos de pulmón, 22 de hígado, 142 de riñón (120 cadavérico y cuatro intervivo), cinco de riñón y páncreas y uno de hígado y riñón.
Respecto a la cantidad de personas que esperan un trasplante, el coordinador del instituto dijo que ha aumentado y actualmente hay 400 personas en el país que necesitan un trasplante de riñón, 20 de corazón y 25 de hígado. Asimismo, existen aproximadamente 200 personas que requieren un trasplante de córnea, que no es un órgano sino un tejido.
“La cantidad de personas que necesitan trasplantes aumenta día a día porque los factores de riesgo, como hipertensión arterial, diabetes, ser fumador, tener una vida sedentaria afecta el árbol vascular y esto altera el corazón, las arterias coronarias o el riñón y eso lleva a que con el tiempo esos órganos padezcan insuficiencias y, en una etapa extrema, requieran el trasplante como única solución”, señaló.
750.000 VOLUNTADES
Consultado al respecto, Mizraji informó que actualmente unas 750.000 personas ha expresado su voluntad de ser donante y consideró que es una cifra muy buena considerando que en nuestro país hay poco más de 3.200.000 personas, según el último censo, y que para expresar la voluntad de donación de órganos es necesario ser mayor de edad. “Año a año contamos con 8.000 a 10.000 expresiones de voluntad nuevas”, añadió.
“Igualmente tenemos que seguir trabajando porque aunque haya aumentado el número de trasplantes, todavía hay gente que está en lista de espera y otros que, lamentablemente fallecen sin haber recibido el trasplante que necesitan”, dijo Mizraji.
De acuerdo a la legislación vigente, salvo que la persona haya dejado una constancia expresa de su posición en contrario, toda persona que sufra muerte violenta y presente muerte encefálica en un CTI se convierte en donante. “Para eso es necesaria la autorización del juez penal y del forense que trabaja en el caso puesto que no se puede tocar nada que invalide la pericia”, explicó. Existe un proyecto de ley que universaliza esta condición de donante a toda persona que presente muerte cerebral, pero aún no está vigente, por no haber sido todavía aprobado por ambas cámaras parlamentarias.