Locales | 05 Feb Respecto a la situación laboral en Paysandú, el presidente del Centro Comercial estimó que están incidiendo situaciones puntuales de alguna gran empresa, como es el caso de Pay-lana, pero en el marco de una coyuntura del departamento en que hay situaciones dísimiles.
Evaluó que “no hay gran nivel de desempleo, pero hay situaciones complicadas en algunos emprendimientos fabriles, como todos sabemos, de los cuales el más notorio es el caso de Paylana, en tanto Paycueros ha vuelto más o menos a su funcionamiento normal, con un desempleo mínimo actualmente en su caso, pero esta situación naturalmente afecta a muchas familias que demandan servicios y consumen en Paysandú. Como todos sabemos, el verano en Paysandú achata la actividad de todo tipo, y recién se mueve sobre fines de febrero y principios de marzo, en las papelerías y con las ventas de elementos para estudio, entre otras actividades. Ello influye para que hoy se note un poco más de desempleo en general, pero como todos sabemos el año verdadero comienza en marzo, porque además de las librerías y papelerías funcionando también lo hacen las cantinas y otros comercios por la mayor actividad en general”. En cuanto al desenvolvimiento empresarial, indicó que indudablemente el empresario enfrenta un aumento de los costos en general, tanto en el plano de las cargas laborales y los insumos como materia prima y energía, entre otros bienes y servicios, y “el costo financiero para abrir y mantener el negocio es muy alto”.
“Ya para abrir hay que poner mucha plata y no sabe si al final del día lo puede recuperar. Las cargas sociales son muy elevadas, con BPS, DGI, pagos al personal, UTE, Antel. Pero estas son las reglas de juego y hay que adaptarse a ellas. Naturalmente, los precios de los productos que se venden y los servicios deben estar en consonancia con estas exigencias, porque sin rentabilidad no se puede trabajar”, puntualizó el directivo.