Locales | 18 Feb La evaluación del Verano Educativo es positiva, según informó a EL TELEGRAFO la inspectora de educación inicial Susana Subotin, encargada además del plan “Verano educativo”. Al respecto expresó que “sorprendió gratamente la cantidad de niños que concurrieron y la excelente asistencia”.
En este sentido, dijo que seis escuelas de la ciudad donde se desarrolló el programa --1, 71, 95, 99, 112 y 93-- concurrieron diariamente casi la totalidad de los alumnos inscriptos, en tanto que en las de Quebracho y Piedras Coloradas el promedio de asistencia era de 70 y 50 niños respectivamente.
El Verano Educativo propone una experiencia educativa diferente a la habitual durante el ciclo escolar, basado en actividades de entretenimiento, diversión, ejercicios físicos, paseos y refuerzo de los aprendizajes. Los niños concurrieron en el horario de 8.30 a 13.30 y recibieron desayuno y merienda en la escuela.
En este sentido, dijo que las actividades más disfrutadas fueron los paseos y concurrencia a las piletas en complejos deportivos, disponiéndose para ello de dos ómnibus de Educación Primaria.
Agregó también que, con asesoramiento de una profesional nutricionista, fue elaborado un menú veraniego con énfasis en la incorporación de frutas y verduras. “Fue un menú muy bueno, adecuado a la época”, dijo la jerarca.
Asimismo destacó que hubo escuelas en las que los maestros trabajaron por iniciativa propia más tiempo de las 5 horas diarias previstas y gracias a ello, los niños pudieron concurrir a un partido de fútbol de la selección de Paysandú, por ejemplo, o disfrutar de fogones a la noche, algunos para los alumnos y otros con la asistencia de su núcleo familiar.
“Estaba previsto un gran encuentro final en las instalaciones del parque de la Asociación Cristiana de Jóvenes --institución a la cual agradeció su generosidad al ceder el lugar gratuitamente-- pero debido a las lluvias de la semana pasada no se pudo realizar”, dijo. No obstante, los niños festejaron en cada escuela.
Asimismo, fueron creados espacios para que los padres y demás familiares pudieran apreciar los trabajos que habían realizado los escolares, ya sea en Educación Física, manualidades u otras áreas.
“No es necesario hacer marketing para el Verano Educativo porque el interés y la asistencia es excelente”, dijo la inspectora.
Consolidación de aprendizajes
En tres escuelas, además del equipo integrado por un director, dos maestros, dos profesores y auxiliar de servicio, trabajó también un maestro del proyecto “Maestro más maestro”, que se desarrolla en los últimos tres meses del ciclo escolar con la finalidad de consolidar los aprendizajes, de forma tal que niños de primer año que tenían su pase comprometido puedan superar las dificultades con atención personalizada.
En este sentido, dijo que los resultados también fueron muy buenos en esta área. “Se trata de una atención personalizada en grupos de tres o cuatro niños, en un ambiente menos formal y más distendido del habitual en época de clases y con una propuesta en consonancia con las demás del Verano Educativo”, dijo.
En este sentido, explicó que se trabajó fundamentalmente en el afianzamiento de los aprendizajes de lengua y matemática. “En algunas escuelas donde había talleres de cocina, por ejemplo, se tomó esa actividad como base para trabajar el cálculo y lenguaje utilizando recetas de cocina”, añadió.