Nacionales | 27 Feb Balance de aniversario
El próximo jueves José Mujica cumple dos años en la Presidencia de la República, e ingresa en el que pretende sea un “año bisagra” de “grandes realizaciones”. Algunos medios de comunicación se encargaron en estos días de reunir voces de analistas y políticos para evaluar la marcha del gobierno.
“Estos dos años se pueden resumir en dos años que el país ha perdido”. Con esta frase lapidaria define el politólogo Juan Carlos Doyenart los primeros 24 meses de gobierno de Mujica. “No se ha puesto en marcha ni un solo plan concreto. La infraestructura del país sigue mal, seguimos sin ferrocarril, con un 54% de las carreteras deterioradas, sin un puerto transoceánico, sin una segunda playa de contenedores, sin un plan de desarrollo energético. El país no ha desarrollado una política exterior de apertura de mercados y de inserción, y no ha avanzado en materia educativa, más bien hemos retrocedido”, enumeró Doyenart a El País.
Sin embargo, en términos de popularidad, Mujica tenía un 49% de aprobación de la opinión pública en diciembre (según la medición de Equipos Consultores), por lo cual se ubicaba muy cerca del 48% de las adhesiones que recibió en las elecciones nacionales de 2009.
Piedra en el zapato
De todas formas, el gobierno tiene dificultades para concretar mejoras en temas de gran interés para la opinión pública, como la inseguridad y el acceso a la vivienda, que son de las piedras más duras en el zapato del gobierno. Según el sociólogo Eduardo Bottinelli, de Factum, “está claro que el tema de la inseguridad pública es el principal problema del país para la gente”, aunque “no toda la opinión pública le echa toda la culpa a este gobierno. Un porcentaje importante del público considera que el gobierno está haciendo las cosas bien en materia de seguridad, por ejemplo, en su momento tuvieron gran aceptación los megaoperativos”. Aunque no sea visto como un problema de este gobierno, “la inseguridad sí es un debe”, puntualizó.
La misma opinión tiene el líder del Partido Colorado, Pedro Bordaberry, quien coincidió en que el haber mantenido la política macroeconómica de la administración Jorge Batlle es el punto fuerte y principal acierto de estos 24 meses del gobierno de Mujica. El senador enfatizó por otro lado en el mayor debe de la gestión sigue estando en seguridad y, más allá de los recientes acuerdos logrados, en la educación.
“La seguridad está más que clara como tema, se gasta plata como nunca y estamos peor, creemos que Bonomi no es la persona adecuada para conducir el Ministerio del Interior y hemos presentado 50 medidas concretas. En el caso de la educación hay un problema de gestión, como en la seguridad ciudadana. Tienen el dinero pero la gestión es mala, este acuerdo es un reconocimiento de lo mal que estamos”, dijo.
¿Buque insignia?
En otro orden, el tema de la vivienda, que sería el “buque insignia” del gobierno de Mujica a través del Plan Juntos y del aumento del presupuesto al Ministerio de Vivienda (que recibió el doble de dinero que en el período pasado), ha tenido tímidos avances. Según Bottinelli, “la vivienda aparece como uno de los temas peor evaluados del gobierno”. “La gente tiene dificultades de acceso a la vivienda, nota que los precios de las unidades y de los alquileres aumentan, que si bien hay mayor oferta de créditos, la media de las personas no puede acceder a ellos”, indicó. Para el sociólogo, “la carencia es que no existe una política de vivienda fuerte que responda a las necesidades de la población”.
En los primeros días como presidente, Mujica decía que había uruguayos que no podían esperar por una solución en el tema habitacional. El Ministerio de Vivienda anunciaba que el Poder Ejecutivo emitiría un decreto o ley de emergencia y que se pedirían recursos extra presupuestales para cubrir las necesidades en el tema. Sin embargo, al día de hoy sigue habiendo un 40% de la población que tiene dificultades para el acceso a la vivienda y la permanencia.
Trabas “de adentro”
Un manejo correcto de las políticas macroeconómicas y la voluntad expresa de diálogo más allá de mayorías parlamentarias son los aspectos más destacables para la oposición en los dos años de gestión de Mujica. Entre los debes del mandatario se señalaron su poca capacidad de concreción, la debilidad en el relacionamiento internacional y los desaciertos en seguridad, educación y políticas sociales.
El senador y líder de Alianza Nacional, Jorge Larrañaga, erigido como un cultor de una “oposición constructiva”, destacó que Mujica ha tenido una intención clara de diálogo y de concretar acuerdos con las demás fuerzas más allá de sus mayorías parlamentarias, ya que bien podría haber elegido un camino diferente. Entre los debes, Larrañaga señaló: “Las dificultades han sido más puestas desde adentro del Frente Amplio, desde adentro de algunos sindicatos con posiciones corporativas que desde la propia oposición, han faltado ideas para gobernar y cuando se han tenido, ha faltado la claridad de ejecución”.